La calima ha tomado hoy de nuevo el relevo a las nubes y ha vuelto a dejar en Córdoba una atmósfera naranja, aunque en menor medida a la registrada hace apenas una semana. Esta situación, además, ha provocado que la calidad del aire empeore y ha vuelto a generar un problema de carácter medioambiental.

El Índice Nacional de Calidad del Aire, que mide la Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental en varios observatorios de Córdoba capital, ha determinado un nivel rojo, lo que equivale a una calidad "desfavorable" del aire, un grado menos que lo que ocurrió el pasado 16 de marzo cuando el registro llego a extremadamente desfavorable.

La citada red tiene tres medidores en Córdoba capital y, este nivel rojo en concreto corresponde a los ubicados en el parque de la Asomadilla y en la avenida Al-Nasir, mientras que en el de Lepanto el nivel es amarillo o regular. 

La Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental gestiona otras tres estaciones en la provincia, todas en el norte: en Villaharta, cuyo nivel es razonablemente bueno, en Espiel y en Obejo, donde el nivel es amarillo o regular también.

Ante este aviso rojo, desde la Dirección General del Aire han realizado una serie de consejos para salud. En el caso de la población general, recomienda reducir las actividades prolongadas y enérgicas al aire libre, especialmente si se experimenta tos, falta de aire o irritación de garganta.

Mientras tanto, para los grupos de de riesgo y personas sensibles, plantea reducir las actividades al aire libre, y realizarlas en el interior o posponerlas para cuando la calidad del aire sea buena o razonablemente buena.