Un solo gobierno municipal pero un auténtico guirigay a la hora de afrontar el mismo problema. Mientras la alcaldesa, Rosa Aguilar, aseguraba que las diferencias económicas entre el profesional holandés y el Ayuntamiento han llevado a pensar en "alternativas", el teniente de alcalde de Urbanismo, Andrés Ocaña (también de IU), censuraba las palabras del portavoz socialista, Rafael Blanco, quien demandó un "plan b" para el momento en el que se decidiera acabar con la relación con el despacho holandés.

Ocaña reclamó que se permitiese a los responsables de Urbanismo antes de empezar en "planes b, c, d o z". De las intervenciones del edil de Urbanismo, se deduce que es el más partidario de seguir con la negociación con OMA, "que no es un pulso", frente a Aguilar y Blanco que, ya de forma abierta, presionan en sentido contrario. "Lo importante es que el modificado sea realizable, y no los honorarios", matizó Ocaña frente a lo escuchado estos días por sus compañeros de gobierno.

El factor tiempo es relevante en este momento. Mientras el edil de Urbanismo reclamaba que se dejara trabajar a los negociadores, las palabras de Rosa Aguilar y Rafael Blanco abogan por una resolución inmediata del problema. La alcaldesa sigue manteniendo que quiere que el problema quede encauzado antes de que se cierre el curso político con las vacaciones del mes de agosto. Si por Blanco fuera, ya se habría cancelado toda relación con el holandés y se habría empezado a trabajar en otro sentido. Hoy, el gobierno municipal tiene previsto una nueva toma de contactos para intercambiar información, la segunda en apenas una semana.