Tras dos décadas de procesos administrativos y obras, el traslado de 240.000 documentos y unas instalaciones que pueden presumir de ser de las más modernas de España, la Biblioteca Grupo Cántico de Córdoba es ya una realidad. El consejero de Cultura de la Junta de Andalucía, Arturo Bernal, el ministro de Cultura del Gobierno central, Ernest Urtasun, el director del nuevo espacio, Francisco del Río, y el alcalde de la ciudad, José María Bellido, han inaugurado este miércoles las instalaciones, que ya son de todos los cordobeses.

Una superficie construida de 7.200 metros cuadrados, ideada por los arquitectos Ignacio Pedrosa y Ángela García de Paredes, cuatro plantas, miles de documentos, libros, películas, música, revistas, periódicos y archivos, acceso a internet y grandes espacios para el estudio y un salón de actos que permitirá llenar de contenido el calendario del espacio. Conseguir abrir hoy la Biblioteca de los Patos ha costado una inversión de más de 20 millones de euros, muchos años de trabajo y la sinergia de las tres administraciones: el Ayuntamiento puso a disposición los suelos, el Gobierno de España los fondos y la construcción y la Junta de Andalucía se encarga a partir de ahora de su administración.

La colaboración que lo ha hecho posible ha sido celebrada en la jornada de este miércoles por todas las administraciones como un ejemplo para el resto del país. Urtasun ha mostrado el compromiso del Gobierno de España "con la cultura andaluza" y ha asegurado "plena colaboración" del Ministerio "para poder seguir impulsando la cultura" con equipamientos como el inaugurado en Córdoba y que supone una "grandísima contribución a la cultura española", mientras el alcalde ha expresado su deseo de conseguir "más proyectos así" para la ciudad.

Sus puertas, que dan a la avenida de América, se abren con el objetivo de no quedarse solo como "un templo para albergar libros", sino que se convierta, como todas las bibliotecas, en "dispositivos sociales de igualdad que mejoran la vida de las personas, espacios seguros, de encuentro y de formación, que estimulan y propician la participación ciudadana", ha destacado el ministro. El alcalde y el consejero han coincidido con la premisa de "democratizar" el acceso a la cultura, acercar la lectura a los niños y los más jóvenes y "recuperar el placer de la lectura compartida en un espacio abierto integrado en la ciudad". La Biblioteca está proyectada al exterior y las grandes ventanas dejan ver los jardines de los Patos.

Los cordobeses ya pueden hacer uso de los fondos y acceder al servicio de préstamo personal a través del carnet de la Red de Bibliotecas Públicas de Andalucía, que cerró con más de un millón de visitas el año pasado, según las cifras de la Junta. Desde las administraciones esperan que sea un espacio "para el consumo de las masas". 

La Biblioteca Grupo Cántico era una gran demanda de la sociedad cordobesa, que ha visto cómo pasaban los años y las generaciones sin que el espacio estuviera disponible. Se trata, según el consejero de la Junta, de "la biblioteca pública más moderna y avanzada de España, la última que hemos abierto y que tiene todos los avances tecnológicos" para el uso y consulta de los miles de documentos. La Junya espera que se convierta en una "seña de identidad" de la ciudad, que cuenta con una "ambición cultural" que una capital como la cordobesa "debe tener".  

¿Cómo es la Biblioteca?

La Biblioteca Grupo Cántico consta de cuatro plantas. El sótano, o planta P, alberga la biblioteca infantil, la bebeteca, la biblioteca de madres y padres y un espacio de taller. La planta baja, B, por donde se accede al recinto, cuenta con el salón de actos Carmen Guerra, la sala de estudio Ramírez de las Casas Deza, la zona para consultar la prensa y revistas y acceso a internet.

En la planta 1 los cordobeses podrán acceder a los préstamos de los documentos, a la zona juvenil, de cómics, libros multiculturales y de idiomas, lectura inclusiva, zona de música y cine, donde hay discos y películas nacionales e internacionales, salas de trabajo y, además, se encuentran los espacios de la dirección, de los servicios bibliotecarios provinciales y la administración. Los libros que están bajo llave en el lugar son todos cordobeses.

La última planta, 2, consta de la colección local, un aula de formación, la sala de investigadores Pablo García Baena y salas de reunión. Los libros que están bajo llave en el lugar son todos cordobeses.

El edificio destaca por ser un espacio moderno y tecnológicamente avanzado, equipado con sistemas de última generación que facilitan la interacción y el acceso a la información, siendo puntero en innovación dentro del ámbito de las bibliotecas públicas. La mayor innovación se encuentra en la implantación de un sistema de radiofrecuencia RFID-UHF, un sistema pionero entre las bibliotecas públicas del estado que permite el desarrollo de un sistema completo de autopréstamo, posibilitando la identificación y control de los fondos, el préstamo y devolución de libros y materiales audiovisuales y la protección de los mismos a través de un sistema antihurto.

En el suelo donde se levanta la Biblioteca, como casi siempre que se comienza a hacer una obra en la ciudad, se hallaron restos modernos, islámico-califales, romanos y un sarcófago. La aparición de restos arqueológicos llevaron a la administración estatal a redactar un nuevo proyecto, en este caso de terminación de la obra. El muro califal, que está protegido y visible en la planta sótano del inmueble, data de los siglos X-XI d.C.

Según los hallazgos, este muro "es uno de los vestigios que hablan de la expansión occidental de la medina califal fuera de sus murallas". Sus características constructivas remiten al Califato; en él se emplea la sillería aparejada a soga y tizón, que es una de sus señas de identidad.

La estructura se asienta sobre un cimiento de calcarenita y caliza; sobre él se dispone una hilada de sillería donde alternan sogas y tizones; encima se elevan pilares de sillería a intervalos regulares; los huecos entre ellos se rellenan con mampostería.

"Este aparejo mixto sillería y mampuesto, se utiliza en Medina Azahara y en otras construcciones califales de carácter estatal, como la Almunia al-Rummaniyya. En ésta se conserva un muro muy similar, aunque los huecos entre los pilares van rellenos de tapial", reza la historia. Su funcionalidad no está del todo clara, pero probablemente sirvió, junto a otro muro no conservado, como delimitación de instalaciones industriales.

La historia

El proyecto inicial de esta biblioteca se anunció en el año 2004, pero se le concedió la licencia en 2010. Varios años después de la concesión de la licencia y de iniciar las obras, el proyecto se paralizó en 2014.

El edificio quedó olvidado durante varios años ante la falta de entendimiento entre el Gobierno central y la Junta de Andalucía, que el año pasado acordaron el traspaso y su posterior puesta en funcionamiento.

El espacio abrirá de lunes a viernes ininterrumpidamente desde las 09:00 a las 21:00 al menos durante el mes de febrero. Los fines de semana, es decir, los sábados y domingos, además de día los festivos, la biblioteca permanecerá cerrada.