Esta evocadora madera, descubierta por los incas, ha trascendido en el tiempo y en diversas culturas como un símbolo de purificación y espiritualidad. Durante siglos, el Palo Santo ha sido integrado en rituales y ceremonias religiosas, siendo un instrumento muy valorado por sus propiedades medicinales, brindando bienestar y equilibrio. Y de ahí parte la Bodega Palo Santo, ubicada en la sevillana plaza de la Gavidia, 5, en un espacio que combina con maestría la tradición culinaria con toques innovadores. La propuesta gastronómica del establecimiento se basa en ofrecer tapas y raciones que, si bien están arraigadas en el recetario tradicional, presentan giros contemporáneos. Entre sus platos estrella, los comensales pueden degustar clásicos reinventados como la pavía de bacalao y la cola de toro. Asimismo, Bodega Palo Santo también sorprende con propuestas vanguardistas, tales como la tosta de mejillones en escabeche con foie y el exquisito bombón de cola de toro. Sin duda, un lugar donde la esencia del pasado y la innovación del presente se fusionan en cada bocado.

Salmorejo cremoso en la bodega Palo Santo

Bodega Palo Santo es la visión hecha realidad de Paco Palacios, un sevillano con amplia experiencia en el sector hostelero. Siendo su sueño llevar adelante su propio negocio en su ciudad natal, Paco ha logrado crear un espacio donde el menú nunca es estático. Evoluciona constantemente, refrescándose con nuevas incorporaciones que se presentan a través de las “sugerencias de la semana”, garantizando a los comensales una experiencia culinaria siempre renovada y sorprendente.

Más allá de la comida, la esencia de Bodega Palo Santo radica en la atmósfera que ofrece. Si bien el establecimiento tiene la elegancia y la estructura de un restaurante, brinda la calidez y la informalidad propias de un tapeo tradicional. Este equilibrio se ve reforzado por un servicio que combina profesionalidad con un trato cercano, logrando que cada cliente se sienta como en casa.

Bajo la sección “Aliños y Ensaladas”, destacan platos como la ensaladilla de pulpo al pimentón, el salmorejo cremoso cordobés y el tomate aliñado con melva. Para los amantes de las chacinas, la oferta es variada y exquisita, con opciones como el queso viejo, el jamón, la caña de lomo y un surtido ibérico que promete deleitar al paladar más exigente.

Ensaladilla de pulpo con pimentón

La sección “Nuestros Fritos” presenta clásicos como las croquetas caseras y tacos de bacalao fritos, mientras que las innovaciones como las lagrimitas de presa ibérica con salsa mozárabe y los bastones de berenjenas con salmorejo y crema de bacalao sorprenden y encantan. Los amantes de la carne tienen opciones deliciosas que van desde el solomillo al whisky hasta el solomillo de ternera con ajos y romero salteados. Y, para quienes prefieren los sabores del mar, platos como el salmón con arroz en tinta de sepia al estilo mozárabe o el lomo de bacalao con salsa verde y langostinos ofrecen una experiencia culinaria como ninguna otra.

Los guisos, con el arroz con carrillada y foie o la cola de toro, nos remiten a la cocina tradicional, mientras que las especialidades, como el queso de cabra gratinado con crema de castañas o el bombón de cola de toro en hojaldre, nos muestran una cocina vanguardista. Tampoco podemos olvidar los postres, donde las tartas caseras, el coulant de chocolate con helado de vainilla o la torrija con helado de turrón ponen el broche de oro a una carta que, sin duda, satisface todos los gustos y hacen de Bodega Palo Santo un lugar de referencia.

Pulpo asado en la Bodega Palo Santo