Helados artesanales hechos a diario, cucuruchos o tarrinas, hasta gofres, crepes o tortitas recién hechas. Vasos de fruta con helado y toppings o frappelados, una bebida fría hecha a base de granizado de fruta natural y helado a elegir). Son solo algunos de los productos que ofrece Martonela, la cremería slow que abre sus puertas en Córdoba en la calle Cruz Conde.

Juan Manuel Ruiz Romero es el emprendedor que ha decidido poner en marcha este franquicia en la capital cordobesa, que ya cuenta con numerosos locales en otros puntos de Andalucía y del resto de España. Este joven emprendedor de Lucena ha explicado a el Día que han decidido abrir porque "Córdoba se está empezando a mover después de la pandemia". "Hay turismo y creemos que faltan este tipo de heladerías", ha subrayado.

Local de Martonela, en la calle Cruz Conde.

Una de las claves del negocio es que los helados se preparan directamente en la tienda en "tarrinas de tres litros para que se mantenga fresco", ha indicado.

La apertura de esta nuevo negocio en pleno centro de la capital cordobesa va a suponer la creación de cuatro puestos de trabajo, si bien, la previsión que maneja su responsable es poder llegar a seis o siete empleados. 

Junto a los helados, en este nuevo local el cliente también podrá adquirir cafés artesanales de tueste natural y tés variados, así como batidos frescos elaborados con leche fresca de granja; zumos y granizados naturales.

Martonela, según expone en su página web, defiende la filosofía slow cream con la que "apoya el esfuerzo de los productores locales, por este motivo, siempre que es posible nuestros productos se elaboran con las mejores materias primas provenientes de las granjas más cercanas".