La Policía detiene por homicidio al marido de la joven que murió degollada

El Cuerpo Nacional de Policía ha detenido a Carlos William T., de 29 años y natural de Ecuador, por un presunto delito de homicidio supuestamente cometido al degollar a su mujer, cuyo cadáver fue encontrado por un viandante a primera hora del domingo. El individuo quedó detenido ese día por la noche tras denunciar en la Comisaría la desaparición de Johanna Marlene Ortiz, de su misma edad. El presunto agresor reconoció el cuerpo de la joven, también de Ecuador, y tras ser sometido a un interrogatorio quedó arrestado. Aunque el Cuerpo Nacional de Policía aún no lo ha confirmado oficialmente, todo apunta a que Johanna Marlene es la víctima número 26 de la violencia de género en España en lo que va de año.

Carlos Willian y Johanna Marlene se habían conocido en Ecuador. El primero en emigrar a España fue él y, hace cinco años, ella decidió cruzar el Atlántico desde Milagro, su ciudad natal, según recordaron unos amigos del matrimonio, consternados por lo ocurrido. Se casaron en Córdoba y desde entonces residían en un piso de la calle Algeciras, en el Sector Sur, donde eran muy queridos por sus vecinos. Ella trabajaba en un establecimiento de comida rápida de una cadena local en el centro, y él había tenido numerosos empleos.

Los vecinos de su bloque describían ayer a la víctima -que no tiene familia en España- como una chica "alegre", "muy amable" y "trabajadora". También eran positivas las palabras hacia él. Carlos es un joven "muy educado", "nunca ha dado un escándalo", lo describieron sus vecinos. Por eso les sorprendió que a última hora del domingo un furgón de la policía se detuviera a las puertas del bloque y del coche saliera el individuo con unos grilletes. Los agentes lo llevaron a la vivienda, en la primera planta, y cerraron la puerta para realizar supuestamente una reconstrucción de lo acontecido el día anterior.

Pese a que la Comisaría se niega a ofrecer algún detalle de la investigación, fuentes consultadas indicaron que la agresión pudo producirse en el interior de la vivienda el sábado por la noche y, ya de madrugada, el cuerpo habría sido trasladado en el vehículo de la pareja hasta el Camino de la Miel, a las espaldas del polígono industrial de La Torrecilla. Allí fue abandonado sin documentación y, al filo de las 08:00, el cadáver fue hallado tumbado boca abajo.

El Cuerpo Nacional de Policía barajó al principio la hipótesis de que el crimen estuviera relacionado con la prostitución, debido a que desde hace meses la zona donde se halló el cuerpo es escenario habitual de esta práctica. La Comisaría, no obstante, descartó ayer esta línea de investigación, confirmaron fuentes oficiales.

La noticia del crimen de Johanna comenzó a extenderse ayer por la comunidad ecuatoriana de Córdoba. Y, a mediodía, unos amigos de la pareja acudían a su domicilio para confirmar los rumores: "Ha actuado con sangre fría. El domingo por la mañana Carlos llamó a un amigo para preguntarle si había visto a Johanna. Y lo sabía todo", lamentó una compatriota que prefirió permanecer en el anonimato. "Antes venía mucho con los niños. He pasado con ellos Nocheviejas. No me lo podía creer", dijo la amiga, que nunca vio ningún mal gesto del presunto homicida hacia la víctima. La Policía continuaba a última hora de ayer interrogando a personas del entorno de la pareja.