Córdoba necesita un mayor número de familias que estén dispuestas a acoger a menores que viven en centros de protección. Por el momento, son más de 280 las que ya han adoptado esta decisión y tienen a niños en sus casas en las distintas opciones que existen: adopción, acogida y de colaboración. Éstas últimas se hacen cargo de los niños durante los fines de semana y las vacaciones y, para ellos -los menores-, es la oportunidad que tienen de salir de los centros de protección en los que viven. En estos espacios que hay en Córdoba viven 141 pequeños, de los que el 56% -79- tienen entre 16 y 17 años y el 31,9% entre 11 y 15. A todos ellos se suman uno que tiene entre cuatro y seis, mientras que tres tienen hasta tres años y otros 13 entre siete y diez.

Para aumentar el número de familias que se ocupen de estos menores, la Junta presentó ayer la campaña Siempre en familia: acoger, adoptar, ayudar para concienciar a la sociedad de lo importante que es ofrecer un hogar temporal o permanente a los niños que, por diversos motivos, se ven obligados a dejar su familia. El objetivo de la campaña -que incluye spots televisivos, cuñas radiofónicas y con la que se pretenden generar más de dos millones de impactos a través del hastag#SiempreEnFamilies- es que los menores puedan crecer con una familia que esté "dispuesta a darles el afecto y la estimulación que necesitan para su desarrollo", según expuso la delegada de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, María Ángeles Luna, quien incidió en la necesidad de "captar más familias y dar a los niños la oportunidad de vivir en un hogar". "Aunque nuestros centros están atendidos por excelentes profesionales que cuidan de que no les falte de nada, tenemos que recordar que el entorno familiar es el mejor para el menor, ya que ahí se fomenta el vínculo afectivo, necesario para el desarrollo emocional y social del menor sobre todo en los de corta edad", reseñó.

A la presentación de la citada campaña acudió el presidente de la Asociación Mírame, Enrique Pérez, quien animó a las familias a que acojan niños. Él mismo acogió a uno con 13 años y, señaló que ahora "tiene 16 y no lo cambiaría por nada porque no son niños conflictivos".

La directora de la asociación AVAS de Puente Genil, Araceli Medina, tampoco faltó a la cita y reconoció que una de las urgencias que tienen es que se acojan a grupos de hermanos. A esta urgencia se añade las dificultades que existen para que las familias acojan de manera permanente a niños con menos de diez años.