Con los datos en la mano, los ganaderos de vacuno de leche de la provincia están perdiendo poder adquisitivo. En el último año, el precio de la leche apenas ha subido un 18%, pero los costes de producción (piensos) se han disparado en cerca de un 40%. Esto está provocando que los ganaderos vuelvan a estar molestos e incluso estén barajando iniciar nuevas protestas como las registradas durante el otoño pasado. En el Norte de España, las escenas de productores tirando la leche por la alcantarilla porque les costaba el dinero entregarla se hicieron demasiado habituales.

Ahora mismo, en Córdoba el precio de la leche está fijado en los 42,65 euros por cada 100 litros. En junio del año pasado, en plena crisis del sector, la misma cantidad se pagó a una media de 35 euros en la provincia, fundamentalmente en la zona Norte de Córdoba, principal productora de leche de vaca de toda Andalucía. En un año, el precio ha subido un 18%, pero este incremento es insuficiente para los productores, que ven como el coste de los piensos sigue por las nubes a pesar de que el precio de los cereales ha comenzado a desplomarse. Lo mismo ocurre con los combustibles -necesarios también para el funcionamiento de las vaquerizas-, que siguen altos a pesar de que el petróleo también ha comenzado a bajar.

Los responsables de las lonjas lácteas del Norte de Córdoba califican la situación de los precios de "anormal". Con la situación actual, las tasas deberían subir al menos otro 20% más. Sin embargo, las previsiones apuntan a que los precios se mantendrán estables durante los próximos meses a pesar de que a nivel mundial la producción de leche se ha reducido de forma significativa durante este año.

En concreto, los grandes países productores de leche en Europa (Francia, Alemania, Holanda y Bélgica) han sufrido las consecuencias de grandes huelgas de transportistas. Como ocurrió en España en primavera, los ganaderos han tenido que tirar leche a las alcantarillas porque no había camiones para recoger el producto. Pese a esto, el precio de la leche en Europa se ha mantenido estable. Las previsiones tan sólo apuntan un ligero incremento en los próximos meses, ya que en verano Francia suele poner menos leche en el mercado. Sin embargo, las previsiones pasan por que las subidas sean leves.

No ha ocurrido lo mismo con los piensos. Hace un mes, la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) exigió a las industrias que redujeran de forma "drástica" el precio de los piensos y del pan, de acuerdo con la tendencia bajista de los cereales, cuyas últimas cotizaciones han bajado entre un 23% y un 11,35% respecto al pasado mes de enero.

La organización agraria afirmó que, tras la escalada de precios de los cereales en los mercados nacionales e internacionales, desde principios de año se ha producido un importante cambio de tendencia de esas cotizaciones, con un descenso generalizado de todos los granos. En concreto, las últimas cotizaciones en la Lonja de Cereales reflejan recortes del 11,35% en el maíz y del 23% en la cebada, respecto al mes de enero. En el caso de la soja, ha experimentado un descenso del 17,5% desde junio, según precisó UPA.

Este descenso en los precios de los cereales ha coincidido en el tiempo con la cosecha. Esto también ha provocado que los productores levantaran la voz ante lo que han considerado una especulación encubierta de los grandes comercializadores con este producto de primera necesidad.

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