Después de sólo tres jornadas sólo quedan cuatro equipos invictos en la competición júnior, un torneo que esta temporada se presenta más abierto y apasionante con la división en dos grupos, uno de ellos formado íntegramente por equipos de la provincia y el otro con los mejores conjuntos de la capital peleando por los cuatro puestos que permiten disputar los play off por el título.

Montilla y Cabra marcan el paso en el grupo A con un balance 3-0. Los montillanos -mejor ataque de la categoría con 88.3 puntos por encuentro- no pasaron apuros esta semana en su visita al Lucena (34-93), mientras que los egabrenses se dieron un festín en la cancha del Bujalance (37-100). Priego y Posadas marchan con 2-1 tras una jornada en la que no pasaron apuros para derrotar respectivamente al Puente Genil (81-53) y al Montilla B (74-39).

El partido de la jornada se jugó en el Colegio Cervantes, donde el Maristas derrotó al Salsas Musa por 84-79 para quedarse como líder invicto en el grupo B. Los colegiales son el mejor ataque del grupo con 88 puntos por partido, un potencial que en esta ocasión tuvieron que explotar al máximo para ganar un partido ante otro de los grandes candidatos a pelear por el título. Sólo El Carmen mantiene el pulso con un balance inmaculado, aunque los carmelitas también tuvieron que sudar sangre esta semana para vencer en la complicada cancha del Villanueva (51-56).

El grupo queda ahora claramente dividido entre los dos líderes (ambos con 3-0) y un bloque de cuatro equipos con una sola victoria, con el Salsas Musa haciendo de puente como único conjunto con 2-1.

En una jornada marcada por los marcadores apretados, el Peñarroya sumó su primera victoria del curso al vencer a domicilio a El Carmen B por 66-68, mientras que el Pozoblanco también se estrenó a costa del Addipacor (34-47), que sigue siendo el único equipo que aún no conoce la victoria.