Aplazado en su día, adelantado al viernes (18:30, Vista Alegre) a última hora y de una forma casi clandestina. La forma en la que llega el derbi entre el Cajasur y el Ángel Ximénez da sólo una idea de la delicada situación en la que ambos equipos afrontan un duelo de necesitados, una auténtica final por la supervivencia.

Mucho más para los pontaneses, penúltimos con 8 puntos y a sólo uno de cazar al languideciente PAN Moguer. El larguísimo parón invernal le ha venido fatal al conjunto de Luja Chirosa, que en diciembre había cogido una racha positiva que revitalizó sus opciones de lograr la permanencia. La pasada semana volvió a arrojar buenas sensaciones batiendo al Ars en las semifinales de la Copa Diputación, una dinámica que tratará de mantener esta tarde en la pista del Cajasur.

¿Y qué decir del equipo granate? Aunque todavía quedan 30 puntos en juego, en el club todos son conscientes de que sumar un punto a estas alturas es una condena firmada. Nadie esperaba que la apuesta de la División de Honor Plata fuera a ser tan dura. Difícil sí, pero no tan cruel. Conscientes de que la salvación es una quimera, en el vestuario del Cajasur prefieren tomarse cada partido como una nueva oportunidad de sumar la primera victoria del curso y demostrar que son un equipo digno de la categoría.

Porque más allá de la clasificación y de la realidad de cada equipo, un Cajasur-Ximénez suena a partido grande, a una rivalidad enconada criada a lo largo de los años en las categorías inferiores que la pasada temporada se escenificó en Primera Nacional y que este curso da el salto a la DHB.

Pero hasta el factor cancha se le ha vuelto en contra al Cajasur con un cambio de horario que Antonio Reyes no duda en calificar como "más duro que una derrota". Sin el masivo apoyo que esperaba en la grada y los problemas físicos de jugadores como Escribano, Aguilar, Melgar, Moyano, Hugo Grao y Antonio Hidalgo, los granates parten como víctimas en un choque cuya taquilla irá íntegramente destinada para ayuda a los damnificados por el terremoto de Haití.