La polémica salpicó la primera jornada del Campeonato de Andalucía celebrada en El Fontanar afectando de lleno a Belén Recio, que apuraba una de sus últimas opciones de lograr el billete para los Juegos de Pekín.

La velocista de Ciudad Jardín se impuso con enorme suficiencia en la primera semifinal de los 100 lisos, pero el video finish traído expresamente por la Federación Andaluza -no se arriesgó a que el comprado por el IMD no funcionara- se estropeó momentos antes del inicio de la jornada. De esta forma, los tiempos tuvieron que ser tomados de forma manual, lo que ya imposibilitaba su homologación. Recio marcó un 11.0 manual que la colocaba al borde de la mínima olímpica (11.48), ya que esa marca se corresponde con un crono oficial de entre 11.30 y 11.40.

"Me han hecho perder una gran oportunidad", decía Belén mientras los jueces le explicaban que sólo responsables de la Federación Española podían homologar el registro. Su entrenador, Ángel Moreno, apoyó en todo momento a la velocista, que apenas dos días antes corrió en 11.53 en Granada.

Emilia Paunika o Pilar Cortacero arroparon a Belén y la Federación Andaluza decidió, aunque fuese fuera de concurso, improvisar una nueva carrera de 100 metros para que la cordobesa tuviera otra opción de lograr el pasaporte olímpico estimulada por la presencia de las mejores atletas andaluzas. Tras unos minutos de tensión se celebró esa carrera en la que Belén compitió al máximo, pero ya sin la presión de la competición. Aunque su ritmo fue bueno, sólo pudo parar el crono en 11.60, a sólo 12 centésimas de la mínima para Pekín.

Desolada, llorando sobre la pista y lamentando su mala fortuna, el rostro de Belén Recio reflejaba el marasmo de sensaciones que se vivieron en una primera jornada del Campeonato que, más allá de los resultados, quedará marcada por el bochornoso espectáculo que dejó a la cordobesa sin una gran opción de sacar el pasaporte olímpico.