fútbol lTercera División

Entre la indolencia y el miedo

  • El Pozoblanco y el Córdoba B empatan en un partido sin intensidad y dominado por el respeto mutuo · Los vallesanos engarzan cinco jornadas sin perder y el filial coge dos puntos sobre la zona de descenso

Con un empate ganaron todos en el derbi: el Pozoblanco, que sumó su quinta jornada consecutiva sin perder, y el Córdoba B, que conquistó un punto a domicilio con lo que le está costando sumar fuera este año. Ganaron todos menos el público, que se tuvo que tragar un partido malísimo. No se oyó ni un chiste entre los aficionados que salían por las puertas del estadio, donde no apareció ni una máscara.

No hubo espectáculo, sólo una función empachosa, aburrida y pesada. Desde el primer minuto se vio a dos equipos con tantas precauciones que cuando subían a rematar los córners lo hacían cuatro contados. Muchas veces decimos que el fútbol profesional se está cargando estas categorías porque dan mucho fútbol de Primera en televisión. Pero es que los equipos de Tercera deberían poner también de su parte para levantar a las personas del salón de casa y llevarlas al campo.

No se les puede dar a los hinchas encuentros tan insoportables como el de ayer. La partida de los dos equipos estaba marcada: la persiana abajo, el cronómetro en marcha y un arreón final sin arriesgar demasiado. Dicho y hecho: nada de fútbol, libreta vacía en ocasiones de unos y otros. Con este panorama, el árbitro y sus asistentes no tuvieron protagonismo alguno, hasta el punto de que lo tuvieron que coger en la única jugada del primer acto: anularon un gol legal al filial blanquiverde alegando una falta de Carlos Martínez que no fue tal, pues se tropezaron defensor y atacante y el jugador cordobesista siguió y fue el que marcó.

Si el conjunto de Rafa Berges se encontró con la mala fortuna de que le invalidaran un gol, el Pozoblanco tuvo la mala suerte de quedarse sin Manu Leal por un problema asmático e Isidro por molestias musculares, aunque sus sustitutos, Hugo y Silva, fueran de lo mejor del derbi.

Ya en la segunda parte, Javi López intentó una vaselina con la puerta vacía ante la media salida del arquero vallesano, Miguel Díaz. Si el nueve del combinado blanquiverde falló un gol cantado, también hizo lo propio Javi Cabezas, que no aprovechó un excelente servicio de Hugo. Lo más bonito del choque lo firmó también Hugo, quien estrelló el balón en la madera tras una jugada preciosa.

A diez minutos del final, el árbitro anuló una jugada que acabó en gol de Javi López, que había recibido un pase en posición correcta porque Del Pino y Juanfran estaban por detrás del delantero. En el descuento (largo) volvió otra vez el miedo y todos tuvimos la sensación de que los dos equipos estaban pidiendo la hora. Ayer faltó de todo, hasta ánimo.

Con este reparto de puntos, el Pozoblanco encadena su quinta jornada sin perder y queda undécimo, a cinco puntos de la zona de descenso, mientras que el B tiene un colchón de dos puntos sobre los puestos peligrosos, aunque sigue sin sumar una victoria lejos de la Ciudad Deportiva.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios