La Virgen de la Paz y Esperanza se paseará el próximo domingo por la plaza de Capuchinos y la calle Conde de Torres Cabrera bajo un toldo de flores de papel blancas y verdes. Es el regalo que le han hecho los integrantes del grupo joven de la hermandad con motivo del cierre del programa de actos del 70 aniversario de la bendición de la titular. En torno a 40 cofrades de entre 13 y 20 años, ayudados por familiares y amigos, han sido los artífices de un exorno que comenzó su periodo de gestación el pasado mes de agosto, cuando algunos componentes del grupo joven pidieron participar en la celebración. La escasez de recursos económicos para comprarle alguna joya que pudiera llevar en esta ceremonia les llevó a dedicar su tiempo y hacer las citadas flores.

Coordinado por Rafael Rizos y Manuel de Julián, el colectivo ha pasado medio agosto, septiembre entero y lo que va de octubre entre la casa de hermandad y el local de salida de los pasos -también situado en la plaza de Capuchinos- para la realización de este singular exorno. Según explica Rizos, el patrón que se ha utilizado para confeccionarlas han sido "los modelos que se empleaban cuando éramos pequeños y hacíamos flores de papel para el día de la madre". Su forma se asemeja al clavel y la colocación creará un efecto "voluminoso" que hará que los espacios en los que se sitúen parezcan zonas entoldadas con los colores relacionados con esta advocación, el blanco de la Paz y el verde de la Esperanza.

Después de más de mes y medio de trabajo, a los impulsores de esta iniciativa les cuesta calcular el número de flores de papel que habrá entre la plaza de Capuchinos y la calle Conde de Torres Cabrera. Tras hacer varias cuentas -número de guirnaldas y de flores en cada una de ellas o la extensión de éstas - concluyen que hay en torno a 16.000 flores, una cifra más que suficiente para engalanar la plaza y los alrededores más inmediatos por los que pasará la Virgen de la Paz y Esperanza, sobre parihuela y en rosario de la aurora por la mañana y en su paso en la tarde-noche del domingo.

Rizos recuerda con especial entusiasmo los "buenos momentos" que han pasado en las dependencias de la hermandad durante estos últimos 50 días. Para ellos, ha sido la "convivencia" lo que ha caracterizado estas jornadas de trabajo, en las que, aparte de los jóvenes cofrades y sus familiares y amigos, también han estado presentes voluntarios del colectivo provincial de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC). A este componente del grupo joven de la Paz y Esperanza le sorprende que en la ejecución de las citadas 16.000 flores hayan participado algo más de medio centenar de personas. Siguiendo con el capítulo estadístico, este cofrade de la hermandad radicada en el convento del Santo Ángel explica que cada tira de flores de papel cuenta con unos 20 metros de longitud y cerca de 500 claveles artificiales blancos y verdes. "Va a quedar bonito cuando lo veamos colocado en la plaza y las calles", destaca el integrante del colectivo.

Al margen de entoldar la plaza de Capuchinos y la calle Conde de Torres Cabrera -también están pendientes de conseguir el permiso de los vecinos para hacer lo propio con algunos otros puntos que cruzará el cortejo-, Rizos señala que la hermandad ha pedido a los residentes de estas zonas por las que discurrirá la celebración que engalanen sus balcones con mantones de manila y colgaduras rojas.

Será, en definitiva, una fiesta muy colorista la que se celebre entre la mañana y la tarde-noche del domingo en la capital.