Cuando J.R.R. Tolkien desarrolló la novela de El Hobbit, que marcaría la senda de la trilogía de El Señor de los Anillos, decidió que sus personajes serían grandes aficionados a beber cerveza, fumar en pipa y entonar canciones en una de las tabernas más famosa de toda la Tierra Media: El Poney Pisador. Hace siete años, al calor de los estrenos cinematográficos de las películas de la obra de Tolkien, los hermanos José Manuel y Rafael Perales tomaron la decisión de poner un bar inspirado en dicha taberna. Ante la ausencia de bares temáticos en la capital y la falta de propuestas diferentes en la hostelería, apostaron por un diseño basado en las películas de El Señor de los Anillos y por una oferta gastronómica adaptada a los productos que se narran en las novelas. La fachada se asemeja a un bar celta con ventanas estilo hobbit, es decir, pequeñas, y el interior está decorado con multitud de referencias a la obra del escritor inglés. Junto a las espadas, hachas, vidrieras y letreros, Rafa se enorgullece de tener las puertas de Moria en una pared y las Montañas Nubladas en otra.

Lo que hace único a este bar no es sólo la decoración especial de la que hace gala, sino también su oferta lúdica y gastronómica. En El Poney Pisador ofrecen precios económicos y productos difíciles de encontrar en toda la capital. Sin tener un público específico, el bar está pensado para que todos los que entren a consumir se diviertan. Además de una gran oferta en juegos de mesa, a partir de septiembre cada viernes habrá cuenta cuentos para delicia de los más pequeños. Del mismo modo se celebran fiestas de disfraces en fechas señaladas, como Halloween o en los aniversarios del bar, en los que realizan una gran fiesta de temática pirata. En cuanto a los productos, el batido hobbit es el más representativo del bar, y para su realización se necesita medio bote de nata además de sirope y virutas de chocolate. Aparte de la cerveza de toda la vida, El Poney Pisador ofrece cervezas de sabores, como fresa o frambuesa. "Ahora mismo lo que más tira son los productos con precios bajos como el tubo de cerveza, congelado, que está a un euro", cuenta Rafa. Del mismo modo, el café irlandés que se prepara en El Poney Pisador se está haciendo muy conocido. "Para cada uno estoy media hora ya que lo hago con tres capas, con whisky Jameson". "Hay un cliente que me avisa por whatsapp cuando va a llegar para tenerle preparado el café irlandés", afirma el dueño. La oferta gastronómica está en constante innovación. "Ahora estamos adaptando las tapas", explica Rafa, enumerando nombres de aperitivos como los warguitos (burritos) o el salmorejo estilo Bree o La Comarca, "todos nombres sacados de la obra de Tolkien". Así, potencian las tapas más pedidas durante la semana y las otras las descartan, y las ofertan siempre a precios acordes con la situación actual.

El Poney Pisador es un bar diferente con un ambiente para todos los gustos y edades. Para los amantes de la obra de Tolkien es un local imprescindible, pero además es un sitio tranquilo y agradable en el que todos pueden sentirse cómodos mientras degustan una tapa de La Comarca o un batido al estilo Hobbit.