El arte fenicio, griego, romano o andalusí sirve de inspiración para crear joyas que acercan estas culturas en los distintos museos y yacimientos de las ciudades españolas. Y es que las joyas se usaron en la antigüedad para decorar desde edificios públicos hasta tumbas, dando una imagen de unificación para las ciudades del Imperio Romano. Además servían como elementos de adorno personal.

Desde el negocio llamado Orfebreluna, Manuel Gómez Luna distribuye este tipo de joyas que cuentan siempre con una base histórica. "Mi inspiración es a través de los libros de historia, me gusta el arte y la arqueología y eso es lo que plasmo en mis diseños, las diferentes culturas que han dejado huella", afirmó Gómez. Su casa rebosa de libros con la historia de las joyas de distintas épocas y culturas. "Algunos amigos nos traen libros de distintos países, así tenemos las estanterías llenas", comentó Gómez mientras mostraba una de las publicaciones.

Gómez vende a distintos negocios que le solicitan modelos de su colección de joyas. Además, y es aquí donde recae la peculiaridad, a través de su página web vende los diseños a distintos museos que les solicitan piezas exclusivas. Es el caso de museos tan conocidos como el de Medina Azahara en la ciudad, y el de Bellas Artes en Sevilla. Para el museo de Medina Azahara crea piezas inspiradas en los distintos yacimientos de la zona, que posteriormente se ponen a la venta en la tienda de recuerdos.

En cambio, los cuadros de Zurbarán del museo de Bellas Artes de Sevilla son los que inspiran algunas de las piezas exclusivas que diseña Gómez. También se venden las joyas en Mérida, donde se realizan réplicas. "En las réplicas siempre trato de modificar algo, tomo la idea, una base, luego la joya tiene su propio estilo y diseño", aseguró el empresario.

El resultado son unas piezas cargadas de historia al alcance de cualquiera, ya que los precios son asequibles para los clientes particulares. "Las joyas rondan muy diversos precios para que estén al alcance de la mayoría", afirmó Gómez. "Ahora mismo no tenemos competencia en el sector", aseguró mientras mostraba una de las joyas, un colgante basado en una réplica de una moneda de la época republicana.

Gómez Luna es un empresario con gran experiencia en el sector. En 1975 empezó en el negocio. "Desde siempre me ha gustado el arte, empecé vendiendo las piezas a mis amigos y poco a poco el negocio se fue extendiendo", recordó Gómez. Algo que caracteriza a su negocio es la comercialización de los utensilios de medicina. "Consiste en un set de los utensilios básicos para un médico, también con una base histórica. Se vende mucho porque si no se lo compra el propio médico, se lo regalan", aseguró Manuel.

En cuanto a los materiales, Manuel usa plata de primera calidad y piedras naturales.