Nuestra Señora de la Aurora, de la Hermandad de la Resurrección, salía este cuarto domingo del mes de mayo desde su sede canónica, la Iglesia de Santa Marina. La cofradía está desarrollando una agenda de actos y cultos extraordinarios con motivo del cincuentenario de sus primeras Reglas, aprobadas en 1972. El Arzobispado también ha aprobado una salida extraordinaria del Cristo de la Resurrección el próximo 22 de octubre.

La Dolorosa, obra de Antonio Joaquín Dubé de Luque en 1978, ha presidido de forma excepcional el Vía Lucis que cada año se celebra en estas fechas. Un Cirio Pascual, pintado por Carles Salafranca, era portado sobre unas pequeñas andas llevadas por cuatro monaguillos, precedido por la cruz de guía, hermanos con cirios, representaciones, estandarte, presidencia y una escolta de Protección Civil, cuya patrona es la Virgen de la Aurora.

La Hermandad de Montesión ha prestado las andas que utiliza para los traslados de la Virgen del Rosario; la Hermandad de San Gonzalo ha cedido el manto de la coronación de la Virgen de la Salud, diseñado por Javier Sánchez de los Reyes y ejecutado por Luis Miguel Garduño en 2017. En agradecimiento, la Banda de Música de María Santísima de la Victoria de "Las Cigarreras" interpretaba las marchas "Rosario de Montesión" y "Aires de Triana" en el momento de la salida.

Cirio Pascual portado por monaguillos y la Virgen de la Aurora

Además de la citada formación musical, que acompañó a la Dolorosa durante todo el recorrido, la Agrupación Musical Virgen de los Reyes esperó a la comitiva en la Plaza de San Julián, donde hizo sonar varias marchas mientras la Virgen de la Aurora era mecida por sus hermanos. Una representación de estos músicos portaron las andas poco después, guiadas por el capataz Antonio Santiago Muñoz.

Tras ser recibidos por la Hermandad de San Hermenegildo en la Puerta de Córdoba, la comitiva visitó a las dos hermandades que tienen su sede en la Parroquia de San Julián, donde se rezó la tercera estación. La del Rosario entregó un rosario de plata con perlas de nácar, mientras que la de la Hiniesta obsequió con un broche de una retama de hiniesta labrada en plata. Al salir sonó "La Estrella Sublime", marcha de López Farfán dedicada a la Dolorosa del Domingo de Ramos.

Algunos músicos de Virgen de los Reyes portando a la Virgen de la Aurora

En la calle Hiniesta se produjo un momento entrañable, cuando las hermanas del Colegio de Santa Isabel se asomaron a la puerta para rezarle a la Virgen de la Aurora. La siguiente visita prevista sería a la Capilla de Nuestra Señora de los Dolores, sede de la Hermandad de los Servitas, en el romántico entorno de la Plaza de Santa Isabel. Ya de vuelta por San Luis, como ocurre cada Domingo de Resurrección, se produjo el encuentro con el Colegio de La Salle La Purísima, donde esperaban a su Dolorosa con una lluvia de pétalos y colgaduras celestes y blancas. Una página para la historia de esta joven hermandad que ya cumple medio siglo.