Hemos tenido una semana de muchas cosas, pero que si yo tuviera que contarlas me hacía el lío padre, y es que son de esos asuntos con mucha retahíla detrás, de papeleos y leyes y yo no las termino de entender, que ya sabes ustedes que yo de pocas letras y mucha calle, como me dice de vez en cuando mi amigo Cayetano. Lo más importante que me ha pasado esta semana ha sido la noticia que me dio, precisamente, mi amigo Cayetano y que me ha dejado muy extrañado, que todavía no sé cómo tomármelo, aunque yo creo que es lo mejor que puede hacer. Pues el otro día, vino a recogerme temprano a casa de mi hermana para invitarme a desayunar y para hablar conmigo, que me quería contar una cosa. La verdad es que yo me asusté un poco, que aunque tiene una pata de palo nunca ha tenido nada malo, de salud digo, y me quedé mosca, la verdad sea dicha. Lo que quería contarme es que se quiere jubilar en un par de meses, que por lo visto ya le corresponde y que se está pensando hacerlo, aunque pueda seguir trabajando, si él quiere. Yo me quedé extrañado cuando me lo dijo, para qué nos vamos a engañar, y es que siempre lo he visto trabajando, vendiendo su lotería todos los días, y el que se jubile mi amigo es como si me jubilara yo, que nunca me voy a jubilar porque nunca he trabajado, en cosas legales, quiero decir. Y el jubilarse, queramos o no, por lo menos para mí, es como hacerse mayor, y a lo mejor estoy equivocado, pero es lo que me da. Aunque seguro que estoy equivocado.

Y es que yo sé que la jubilación es lo mejor que te puede pasar, por todo lo que supone, que sigues estando vivo, que has trabajado y que ya es la hora de descansar, sí, y mucho más en este tiempo que se pasan el día avisándonos de que están en peligro y que veremos a ver quién las cobra en el futuro. Todo eso es verdad, sí, pero es que yo solo he conocido a Cayetano con su lotería, todo el día dando vueltas por el barrio, hablando con una y con otro, y no sé si lo va a llevar bien tener tanto tiempo, y no sé si me estoy explicando. Y seguro que muchos dirán que estoy muy equivocado, pues claro, pero es como yo lo veo. Todavía no se lo ha contado a Soraya, que quiere darle una vuelta más. En el fondo, y hasta en la superficie, yo creo que él tiene los mismos miedos que yo. En fin, que para miedo el de nuestro equipo, que vaya mal rato pasamos hasta que pitó el arbitro. Estamos ya a nada de escapar del pozo, que como lo consigamos lo vamos a tener que celebrar como un ascenso y todo.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios