La hermandad del Rocío de Córdoba ya ha puesto rumbo hacia El Rocío, abriéndose paso entre la magnitud de Los Patios, que enfilan su recta final acumulando visitas por miles. Un turisteo confuso, sobre todo el extranjero, que no veía venir en Capitulares (donde se reúnen con los guías turísticos), ni bajando la calle La Feria (San Fernando), el ejército de romeros a pie, a caballo y en carretas cantando sevillanas rocieras que se le venía encima. Imagínense. Venir de cualquier sitio de Europa y encontrarse todo esto junto en un día. Deben sentir el Andalusian Crush.  

Ajenos a Los Patios, los cientos de devotos que la Blanca Paloma atesora en la ciudad se han echado a la calle este jueves con sus sombreros cordobeses y trajes de gitana, como es tradición, para acompañar al Simpecado por las calles de Córdoba en los primeros tramos de su trayecto, desde la iglesia de San Pablo hasta la Mezquita-Catedral (primera parada), y desde allí hasta la salida ya hacia la carretera de Guadalcázar por el polígono de la Torrecilla, recreándose antes por El Campo de la Verdad y los jardines del Rocío, donde se viven algunos de los momentos más esperados del año para ellos. 

Por delante, algo más de 200 kilómetros que conquistar un año más, en nueve jornadas de camino, para llegar el próximo viernes 17 de mayo con el Simpecado a las plantas de la Virgen almonteña. "Habrá días duros y difíciles en los que cueste levantarse y seguir", pero ahí será donde se experimentará "la fraternidad del Camino", ha alentado el capellán Tomás Pajuelo en la misa de romeros.   

Alrededor de unos 180 hermanos han iniciado este jueves la peregrinación desde Córdoba -30 más que el año pasado-, a los que se irán incorporando muchos más de otras hermandades filiales hermanadas durante la próxima semana, hasta alcanzar los 220 que la hermandad cordobesa prevé que lleguen andando hasta la aldea almonteña. El cortejo total lo componen 11 coches de caballos y 20 carriolas, además de carretas orgánicas y de carretera.

"Hay mucha ilusión y muchas ganas", reconocía ya en la calle la hermana mayor de la hermandad del Rocío de Córdoba, Lupe Grande, que vive de una forma "más sosegada" su segundo Camino al mando de la cofradía. Como novedad de este año, Lupe Grande ha destacado la contratación de un autobús para sumar otros 55 hermanos al paso por El Quema, respondiendo a una de las demandas más verbalizadas en el seno de la cofradía.

En este 2024, la hermandad del Rocío también presumía de su Simpecado ya restaurado que ha copado todos los esfuerzos de este año. Por él han pasado a numerosos bebés ya encima del carruaje, a las puertas de la iglesia. El objetivo para el próximo, dicen, está centrado en mejorar el techo de la carreta. 

Más seguridad

De acuerdo con el plan Romero, que ya diseñó la hermandad matriz de Almonte para el año pasado, volverán a pasar menos carriolas cordobesas por la Raya, sólo las esenciales. "El año pasado fue la novedad, molestó a algunos hermanos, pero nos tenemos que acostumbrar", ha zanjado la hermana mayor, que valora el muchísimo trabajo que hay detrás para que todo funcione. Respecto al Rosario del Domingo, para que dé tiempo a pasar a todos los Simpecados antes de que los almonteños salten la reja, no afectará en nada.

"Mi deseo para el Camino es que lleguemos todos bien de salud y que la Virgen del Rocío nos dé salud para volver un año más", ha pedido Lupe Grande.