El número de monterías, ganchos y batidas de caza mayor que se han celebrado este año en la provincia de Córdoba se ha mantenido en la temporada que ahora concluye. Sin embargo, la difícil coyuntura económica actual ha afectado de lleno a la venta de puestos, cuya comercialización ha generado menos beneficios que en años anteriores para los organizadores de las grandes citas de la caza en la provincia. Y es que la crisis se agravó casi al mismo tiempo en que comenzaba la temporada 2008-2009 y eso ha hecho que el puesto que valía 1.000 euros se quedara en los 700, y gracias. Organizadores de monterías consultados por El Día han señalado que incluso se han llegado a suspender batidas debido a que no llegaban a cubrir gastos.

Entre octubre y este fin de semana -la temporada concluyó el día 8, pero se ha prolongado hasta ayer en casos extraordinarios- han tenido lugar en la provincia 514 monterías en sus distintas modalidades, cuatro más que el año pasado. Eso significa que la actividad sigue fuerte en Córdoba, pero se ha monteado de otra manera.

Antonio Domínguez, abogado y asesor cinegético, manifestó a El Día que las cacerías que más han notado la crisis son las de calidad media, aquellas en las que un puesto vale entre los 500 y los 1.500 euros. "En estos casos ha costado mucho vender las posturas porque la crisis ha tocado a los potenciales compradores de estas acciones, que son los autónomos o los pequeños y medianos empresarios", señaló Domínguez, quien aseguró que muchas de estas cacerías se han suspendido porque no se vendían los puestos. En otros casos, según este abogado experto en temas cinegéticos, se ha bajado el precio de salida del puesto y de 1.000 euros de inicio se ha quedado en 600 ó 700 euros. A veces, los pasos se han quedado sin vender.

En el extremo opuesto se encuentran las cacerías de alto standing, aquellas en la que una postura puede superar los 2.000 o los 3.000 euros. En estos casos, Domínguez señaló que "estas monterías tienen un cliente fijo de elevado poder adquisitivo, al que no le afecta la crisis por ahora y sigue gastando lo mismo".

Y luego están aquellos que al no poder pagar las cacerías de nivel medio han rebajado sus pretensiones y se han dedicado esta temporada a acudir a monterías de menor calidad, que podrían ser aquellas en las que un puesto apenas supera los 400 euros.

Organizaciones de monterías como la Sociedad de Cazadores de Vallehermoso, con sede en El Viso de los Pedroches, han mantenido este año las ventas de puestos y lo han agotado todo. Con unos resultados más que óptimos, las siete monterías que han vendido a unos 250-300 euros el puesto "se han comercializado muy bien", según explicaron a El Día fuentes de la citada sociedad. No obstante, para vender la montería cuyo precio por puesto estaba en los 900 euros lo han pasado peor, según explicaron.

La montería implica además a muchas personas, cuyos ingresos anuales dependen en parte de la caza. En municipios como Hornachuelos, Cardeña, Montoro, Espiel, Santa Eufemia o Posadas, entre otros, se vive muy de cerca una actividad que mueve casi 500 millones de euros al año en la provincia. Félix Sánchez, rehalero de Villaharta, asegura que, aunque "a mí me ha ido bien este año, hay que reconocer que a muchos les has costado más ir de montería que antes y han ido a menos manchas". Cada rehala suele trabajar a cambio de un puesto en la cacería o por unos 200 ó 300 euros al día. Sánchez afirma que en el caso de las monterías en las que acuden a cambio de un dinero "han intentado regatear" las ganancias de quienes se encargan de levantar las piezas que luego se abaten en las posturas. Postores, carniceros, guías y guardas son otros de los oficios que genera la montería.