"Están sin ropa, sin viaje y sin solución". De esta manera resumía ayer Juan Antonio Rodríguez "el sentir" de su hijo y sus compañeros. Rodríguez es padre de uno de los 33 alumnos del instituto Cárbula de Almodóvar del Río que se vieron afectados por el incendio a la altura de Guadalajara de un autobús que llevaba a los jóvenes de viaje de fin de curso. Padres y alumnos se concentraron en la tarde de ayer a las puertas del centro de Educación Secundaria de la localidad de la Vega del Guadalquivir para protestar después de que la aseguradora Patria Hispana decidiera no indemnizar a las familias víctimas del accidente, "pese a que la mayoría de ellos perdieron todas sus pertenencias tras el incendio".

Ayer mismo, el Ayuntamiento de la localidad cuca ofreció ayuda jurídica a los padres de los menores para volver a solicitar las indemnizaciones. La propia alcaldesa de la localidad, María Sierra Luque (IU), ha manifestado que colaborará en todo lo que esté en su mano para que se solucione este asunto "para lo que se ha puesto a su disposición "todo el asesoramiento jurídico que estimen necesario". La regidora municipal señaló asimismo que "no se ha tenido en cuenta, a la hora de tomar esta decisión de no indemnizar, el mal rato que pasaron y las consecuencias psicológicas que están sufriendo algunos de los alumnos, pues muchos de ellos siguen teniendo trastornos para conciliar el sueño tras el susto".

El suceso se produjo el pasado 24 de marzo cuando los alumnos, acompañados de dos profesoras del centro, vieron cómo el autobús en el que viajaban en su excursión de fin de curso era pasto de las llamas por una avería del motor, sin que tuvieran tiempo para recuperar el equipaje de casi todos ellos. Los padres, tal y como puntualizaron ayer, no descartan continuar con las movilizaciones si no se les da una respuesta a sus demandas.