Rusia atacó con seis misiles de crucero Kalibr objetivos del grupo terrorista yihadista Daesh en el territorio de Siria, informó ayer el Ministerio de Defensa ruso.

Los misiles fueron disparados desde el Mediterráneo por las fragatas Admiral Essen y Admiral Grigorovich y el submarino Krasnodar, que efectuó el lanzamiento en posición de inmersión, precisó el comunicado de prensa castrense. Defensa destacó que todos los cohetes impactaron en sus objetivos: puestos de mando y arsenales del Daesh en la provincia de Hama. Posteriormente, aviones de las Fuerzas Aeroespaciales rusas bombardearon los restos de las instalaciones yihadistas atacadas con misiles.

Según Defensa, "los altos mandos de Turquía e Israel fueron informados oportunamente" del lanzamiento de los misiles de crucero.

El lunes pasado, al día siguiente de que un caza F18E Super Hornet estadounidense derribara un avión sirio SU-22, Moscú cesó la cooperación con EEUU en el marco del memorándum para evitar incidentes en el espacio aéreo de Siria.

Además, el Ministerio de Defensa de Rusia advirtió de que cualquiera aeronave, avión o dron, de la coalición internacional liderada por EEUU que sea detectado en el espacio aéreo sirio al oeste del Éufrates será seguido "en calidad de blanco aéreo" por las defensas antiaéreas rusas.

Por otro lado y según la ONU y activistas, el Daesh obstaculiza la salida de los civiles que desean huir de la ciudad siria de Al Raqa, objetivo de una ofensiva de una alianza armada liderada por milicias kurdas y apoyada por EEUU.

La Oficina de Coordinación Humanitaria (OCHA) de la ONU en Siria explicó en un informe que el Daesh está aplicando medidas restrictivas para disuadir los movimientos de los civiles que buscan seguridad fuera de la urbe y apuntó que hay "informaciones anecdóticas" de venganzas por parte de los yihadistas contra las familias que tratan de escapar, como la destrucción de sus coches y bienes, y que también son sometidas a castigos y acoso.