Ya saben de qué va el diálogo social: el Gobierno, la patronal y los sindicatos se reúnen, hablan de tú a tú de las reformas económicas y laborales necesarias e intentan buscar un acuerdo. El presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, ha procurado seguir la tradición socialista en este particular asunto: aprobar unilateralmente las leyes menos polémicas e incómodas y dejar sobre la mesa del debate temas tan espinosos como el abaratamiento del despido. Si la negociación se encalla, si los sindicatos o la patronal se enrocan, siempre existirá la excusa del haberlo intentado. Es lo que ocurre ahora. Es lo que advirtió ayer el ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, cuando adelantó que ni habrá rebaja de las cotizaciones sociales ni se creará un contrato anticrisis con indemnizaciones menos gravosas para el empresario.

Las discrepancias son tan evidentes que la cita prevista para ayer quedó pospuesta. Esta misma semana, probablemente el jueves, deberían retomarse los contactos. Las cosas están como estaban. Tanto Comisiones como UGT esperaban ciertas cesiones y se toparon, cinco días atrás, con un regreso de la CEOE a sus máximos. El secretario general de la patronal, José María Lacasa, negó la mayor y aclaró que la organización defiende los planteamientos de hace meses. "Tenemos los mejores deseos de alcanzar un acuerdo, pero no a cualquier precio", señaló.

La CEOE pone la mesa una rebaja de las cotizaciones de la Seguridad Social de hasta cinco puntos. Corbacho y la ministra de Economía, Elena Salgado, negaron tajantemente tal posibilidad porque supondría, según sus cálculos, "un déficit importante" de alrededor de 18.000 millones de euros. El "contrato del siglo XXI" acuñado por Gerardo Díaz Ferrán supondría asimismo para el Ejecutivo traspasar "una línea rojo".

Los sindicatos reiteraron que la CEOE ha vuelto a plantear cuestiones que había retirado de la negociación. Así, el secretario de Comunicación de CCOO, Fernando Lezcano, afirmó que la CEOE no había vuelto a poner sobre la mesa estas cuestiones desde que se retomaron los contactos del diálogo social el pasado 20 de mayo, cuando la patronal y los sindicatos se reunieron con Zapatero. Desde San Lorenzo de El Escorial, el secretario general de UGT, Cándido Méndez, afirmó que "no es de recibo" que la patronal "vuelva a máximos" en la negociación del diálogo social, e instó a los empresarios a recuperar el espíritu de la reunión "al más alto nivel" del 20-M.

Además, Méndez sostuvo que las últimas medidas del Gobierno han tenido "una mayoría de contenidos" para apoyar a las empresas, por lo que estimó que se debe buscar "más equilibrio" en las iniciativas contra la crisis.

El Gobierno presentó a los agentes sociales en junio el borrador con sus propuestas, entre las que se incluyen la rebaja de medio punto en las cotizaciones sociales o el pago de 420 euros mensuales durante 6 meses a los parados que hayan perdido la prestación por desempleo.