Con la confianza que dan las últimas dos victorias logradas, Luis Carrión quiere que el Córdoba siga instalado en la ola positiva para revertir la mala dinámica liguera en El Arcángel, donde no se gana desde el 24 de septiembre cuando cayó el Gimnástic (2-0). Tras dos derrotas seguidas, la última ante el Getafe supuso el punto y final a la era Oltra, el preparador catalán se estrena al calor del hogar en liga. "En el fútbol pasas de estados anímicos malos a buenos muy rápido, pero hay que tratar de estar estables", comentó el técnico cordobesista. Además, agregó que "llevamos pensando en el partido del Cádiz desde que acabó el de Reus, pero me gusta el ánimo del equipo".

Con Deivid y Markovic en la enfermería, Carrión tiene disponibles a los 19 jugadores profesionales, además de contar con Javi Galán y Esteve, que se han ganado su sitio en el primer equipo. "Está claro que cuantos más jugadores tenga, mejor, pero es un problema a la hora de hacer la alineación", reconoció el preparador catalán. No obstante, indicó que "estoy convencido de que el que juegue lo va a hacer bien y el que no juegue también va a aportar lo que necesite el equipo".

Sobre el compromiso de hoy frente al Cádiz, Carrión espera "un partido con un equipo fuerte en defensa, con jugadores rápidos arriba, que salen a la contra con velocidad por banda, y Ortuño quedándose más el balón". A pesar de todo, "esperemos llevar la iniciativa".

Entre los retos a corto plazo, el preparador catalán comentó que "el primer objetivo es el más cercano y es ganarle al Cádiz". Además, "hay que transmitirle a la gente lo que queremos y eso pasa por correr en el campo y tener nuestro modelo, tener el balón, y al final ganar, porque se trata de ganar". De hecho, "intentaremos ganar donde sea necesario, pero en casa siempre es más bonito porque estás con los tuyos", apostilló el entrenador del conjunto cordobesista, que vivirá su primer partido liguero en El Arcángel tras su estreno en la cita copera frente al Málaga (2-0).