Aceptado como bueno el punto de Castalia, el Córdoba ha entrado en la cuenta atrás. Lo hace con optimismo, después de neutralizar un marcador adverso en el estreno de banquillo de José González, y con la vista puesta en las diez jornadas que faltan para cerrar esta estresante temporada. El conjunto blanquiverde encara la recta definitiva en el decimoséptimo puesto, con un estrecho margen de tres puntos sobre la zona de descenso y el lógico recelo hacia un calendario que aún deparará muchos sobresaltos.

El Córdoba dio la cara en el debut de José. Cierto es que lo pasó mal ante el Castellón, por momentos una máquina que empequeñeció al cuadro visitante, pero hay que reconocer el espíritu de superación de un equipo que impidió la tercera derrota consecutiva con un gol de Javi Moreno a la salida de un córner. Y puntuó en un feudo harto complicado, donde los de Pepe Murcia han cimentado su candidatura al ascenso. Incluso parece que la fortuna, tan esquiva en la etapa de Paco Jémez, ha cambiado.

La pelea por la permanencia se ha recrudecido, con hasta una decena de proyectos apilados en una franja de diez puntos. El Hércules y el Salamanca, con 41 puntos, lo tendrían que hacer fatal en lo que resta para bajar. En el ajo andan metidos un Granada 74 (40 puntos) en regresión y un Cádiz (39) que acaba de fulminar a Calderón. Distinta es la perspectiva del Racing de Ferrol, también con 39 puntos y con la moral por las nubes tras vencer consecutivamente a la Real Sociedad y al Celta, o Las Palmas, con 38 gracias al postrero empate de Marcos Márquez en el derbi con el Tenerife. Justo detrás, con 37, se encuentra el Córdoba.

Los rivales directos han incrementado el ritmo en la última jornada, aunque la seguridad que da esa barrera de tres puntos se mantiene intacta. Sólo la pifió el Alavés, que permanece con 35 puntos. El Nàstic sumó en Gijón y lleva 34, al igual que un Albacete emocionado con el triunfo ante el Sevilla Atlético. El Xerez (33) continúa su escalada de la mano de Esteban Vigo tras superar al Cádiz –algo más que una victoria por aquello del valor anímico–, al tiempo que el Poli Ejido anda rezagado, con sólo 30 puntos, y cierra la clasificación.

Quedan diez jornadas y al Córdoba le pueden valer numerosas combinaciones para seguir luciendo en el escaparate profesional. Una de ellas, no demasiado ambiciosa, señala que tres triunfos, cuatro empates y tres derrotas deben de bastar para asegurar la permanencia. Con ese bagaje, el equipo alcanzaría los 50 puntos, en teoría suficientes para mantener la plaza en Segunda.

Todo comenzará el sábado (18.30, Canal 2 Andalucía), ante el Eibar. El test con el conjunto armero adquiere un interés inusitado: primera aparición de José González en El Arcángel y oportunidad irrechazable para refrendar que el Córdoba no es uno de los cuatro peores equipos de la categoría. Una victoria atajaría los malos augurios y ayudaría a encarar los siguientes compromisos con ánimos renovados. No obstante, la ansiedad es la peor enemiga imaginable.

En los cinco choques posteriores habrá duelos con perseguidores como el Poli Ejido, el Xerez y el Albacete, amén de otra cita crucial en casa (Las Palmas) y la visita a Elche. Y en el remate de la campaña, la despedida de El Arcángel frente al Racing de Ferrol se verá rodeada por pruebas de fuego ante aspirantes al ascenso (Numancia, Sporting y Real Sociedad), aunque está por ver si llegado el momento estarán jugándose los cuartos o dejándose llevar. Diez, nueve, ocho...