Pawel Kieszek. Futbolista

"Mi ilusión es jugar en Primera y, si tengo la oportunidad, me gustaría conseguirlo"

  • El arquero polaco no esconde su deseo de llegar a la élite pero está totalmente centrado en la salvación del Córdoba

  • "Si tengo salud, puedo jugar cuatro o cinco años más a nivel alto", confía el portero blanquiverde

Pawel Kieszek (Varsovia, 1984), es un tipo singular. Un polaco con marcado acento portugués -en el país vecino desarrolló gran parte de su carrera- que domina el castellano mucho más de lo que él cree. Desde que llegara a Córdoba en julio de 2016 apenas se le ha visto por la sala de prensa de El Arcángel en dos ocasiones, incluyendo el día de su presentación. En casi dos años en el club blanquiverde, nunca ofreció una entrevista y su voz no sonó en ningún medio de comunicación a pesar de ser uno de los grandes pilares del equipo. El polaco encuentra un mejor acomodo a su carácter reservado lejos de los focos, aunque en las distancias cortas es un tipo ciertamente encantador, bromista y que habla de forma clara y directa. Su carácter va muy ligado a su posición en el campo, la más solitaria, la que más serenidad requiere. Con ese espíritu afable y apaciguado, Pawel bromea con el fotógrafo cuando le toca posar para la entrevista y, sin perder la sonrisa, contesta a todas y cada una de las preguntas que se le plantean poniendo énfasis en que se le entienda lo mejor posible. Sólo su autoexigencia le impide ver que aunque a veces confunda algunos términos entre el portugués y el castellano, su mensaje cala mucho más que el de la mayoría de sus compañeros de profesión.

-Lleva 266 minutos sin encajar gol, en una temporada complicada, imagino que contento y esperanzado en que la racha siga adelante.

-Es la mejor racha de la temporada y es importante porque el equipo se siente más seguro. Pero realmente sólo son estadísticas y lo importante es que el equipo vaya ganando partidos, cuando encajamos, si ganamos los tres puntos tampoco pasa nada.

-Pero los datos dicen que si el Córdoba no encaja gol, siempre gana los partidos.

-Ofensivamente estamos muy bien porque tenemos jugadores muy buenos, como Sergi Guardiola. Siempre hacemos goles y eso es bueno. Sabemos que cada partido podemos hacer daño al equipo rival.

-¿Qué ha cambiado el equipo en su forma de jugar que les hace ser más seguros en defensa?

-Ahora jugamos más juntos, somos más agresivos en defensa. También ahora creemos más en nosotros mismos. Este era el momento, la última oportunidad, para reaccionar o dejar de luchar y asumir que íbamos a bajar.

-A cambiar esa mentalidad ha ayudado el nuevo entrenador. ¿Qué destacaría de Sandoval?

-Habla muy positivo con nosotros, un poco más agresivo pero de manera buena. Cuando fallamos en alguna cosa del trabajo, él habla con nosotros con fuerza, siempre positivo y está muy pendiente de nosotros.

-Usted es el portero del equipo más goleado de Segunda División, ¿cómo se sentía encajando tantos goles?

-Cuando no llegan los resultados, siempre aparece la inseguridad, es algo normal. Ahora tenemos eso, más tranquilidad y seguridad, y también un poco más de suerte, que es un factor importante.

-¿Le ha afectado en su confianza la mala temporada del equipo?

-Nunca te sientes bien cuando encajas goles, sean uno, dos o cinco, porque siempre piensas que puedes hacer más. Yo creo que es importante creer en el trabajo diario porque nosotros siempre trabajamos bien con Sebas [Moyano, el preparador de porteros del club], y aunque encajemos goles tenemos que trabajar siempre fuerte. Mentalmente tienes que estar preparado para encajar goles, porque es fútbol y es algo que pasa.

-¿Le sorprendió el poco rendimiento del equipo después de la buena pretemporada?

-No lo esperábamos pero podía pasar. En pretemporada tampoco jugamos con equipos demasiado buenos. Siempre competir en liga es bastante diferente. Si ganas todos los partidos en verano, como nosotros, no te sirve de nada, luego la liga es lo importante.

-¿Llegó a dudar de su calidad?

-No creo que fuera así. Yo sé que soy un buen portero, tengo cualidades y si un día encajo cinco goles no quiere decir que sea malo. Yo puedo fallar también, eso es normal. Pero lo que más estaba era jodido, no tenía la felicidad de ahora. Entrenábamos y lo hacíamos bien, pero sin alegría porque no llegaban los resultados. Esos momentos siempre son malos para el jugador.

-Ahora, sin embargo, vuelven a creer en que la permanencia es posible.

-Los jugadores y también los aficionados, toda la gente piensa que se puede conseguir. Eso es importante, todos juntos será más fácil alcanzar el objetivo.

-¿Cómo han notado los jugadores el cambio de propiedad?

-Ya lo dijo Javi Lara antes, que nos sentíamos un poco abandonados. Y eso lo resume todo. Ahora no estamos abandonados. Es más fácil trabajar cuando un club es profesional. Si tú ves que el presidente, los trabajadores y todos trabajan para salvarse, para los jugadores es más fácil dar lo mejor de sí mismos.

-Acaba contrato, aunque en teoría ya ha jugado los partidos necesarios para renovar con el Córdoba. ¿Seguirá Pawel Kieszek en el Córdoba la próxima temporada?

-Yo vi las noticias de que el contrato se renovaba después de jugar 25 partidos pero eso no es la verdad al cien por cien. Yo sé las cláusulas pero no puedo hablar de ellas, es un tema para hablar con el club. Pero ahora es importante concentrarse en salvarse y luego ya veremos qué pasa. Ahora no vale la pena pararse a pensar en eso.

-Desde su llegada aseguró que su objetivo era jugar en Primera. ¿Se ve haciéndolo con el Córdoba?

-Es posible, porque esto es fútbol y todo puede pasar, pero primero tenemos que salvarnos. Después habrá que ver si hay acuerdo o no con el club, eso se hablará cuando sea el momento adecuado para ello. Mi ilusión, como la de cada jugador, es jugar en Primera y si tengo la oportunidad, me gustaría conseguir ese objetivo.

-La afición le valora mucho en Córdoba, ¿es algo que pesará a la hora de tomar una decisión sobre su futuro?

-Me gusta sentir el cariño de la gente. Es una cosa que se valora. Yo luego tendré que hacer balance, ver las ofertas que tenga y qué es lo mejor para mí y mi familia. Pero es un factor positivo. Aquí en Córdoba, ganemos o perdamos, hay un grupo de aficionados que siempre nos esperan a la salida del garaje y nos animan. Eso es importante. En mi carrera pasé por muchos clubes y creo que dejé buenas sensaciones, pero tanto como aquí no.

-El campo volverá a llenarse para el partido de mañana ante el Oviedo. Imagino que para un futbolista es el mejor escenario posible.

-Personalmente me gusta mucho jugar con tanta gente en el estadio. Eso es el fútbol. Yo cambié Portugal por España porque era uno de mis objetivos, pero cuando Emilio Vega me mandó un vídeo de los aficionados de aquí, me gustó. En Portugal, en mi último club [el Estoril], teníamos muy buenos aficionados pero muy poquitos, al estadio venían 1.500 ó 2.000 personas. Y aquí en Córdoba la afición es muy buena. Esa es la esencia del fútbol.

-Lleva cinco penaltis parados. ¿Ha tenido antes un año tan bueno en ese apartado?

-No he tenido tanta suerte antes. Quizás he parado dos o tres penaltis alguna temporada, pero nunca cinco. Es una cosa bonita pero vamos a ver si sirve para que el equipo alcance el objetivo.

-Pero no me dirá que sólo es suerte, algún secreto tendrá.

-Es trabajo y yo tengo un secreto, que no voy a decir porque quedan muchos partidos importantes. Pero principalmente es trabajo y también tener un poco de suerte.

-El último que detuvo, contra el Valladolid, fue el inicio de la buena racha. ¿Cómo lo vivió?

-En el campo te sientes contento, pero ahí no sabía que iba a ser tan importante, porque otras veces cuando paré un penalti perdimos. En ese momento, paré el penalti pero teníamos que remontar. Sólo después del partido sentí que esa parada fue muy importante.

-Quizás sea la jugada que cambie una temporada entera.

-Eso sí que lo pienso. Si nos salvamos, puede que esa parada sea la más importante de la temporada.

-A punto de cumplir 34 años, cada temporada se le ve mejor. ¿Cree que le queda margen de mejora en el fútbol?

-Cuando tenía 20 años y compartía equipo con porteros de 30 años, pensaba que yo entrenando más jugaría por delante de ellos, que podía ser mejor que ellos por ser más joven. Ahora lo veo desde el otro lado y creo que cada año estoy mejor, porque ganas experiencia y tranquilidad. Pienso que, si tengo salud, puedo jugar cuatro o cinco años más a nivel alto.

-¿Cómo es la relación entre dos porteros que tienen que competir por el mismo puesto? ¿Qué tal con Igor Stefanovic?

-En mi carrera he tenido diferentes situaciones, con amigos y enemigos, por decirlo de alguna manera, pero no por mi culpa. Siempre me he llevado bien con los compañeros, pero en un club, un portero iba a salir, no salió y luego su relación conmigo cambió porque yo estaba jugando de titular. Mi relación con Igor aquí es muy buena. Con todos, también los del filial, trabajamos bien y nos ayudamos los unos a los otros.

-¿Qué me puede contar de esa apuesta que Sandoval desveló que mantiene con Igor Stefanovic y con usted?

-Si cumplimos la apuesta, voy a disfrutar más que si nos salvamos. No voy a decir nada más [risas]. Es una cosa buena para disfrutar la vida y para motivarse incluso más.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios