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Apuesta en firme

  • El técnico ensaya de nuevo con una línea de cinco zagueros a pesar de la ausencia de Rodas y Antoñito, que se espera que lleguen al partido

Carrión se dirige al grupo junto a Samu, Donoso, Aguza y Alfaro, en la sesión del pasado martes.

Carrión se dirige al grupo junto a Samu, Donoso, Aguza y Alfaro, en la sesión del pasado martes. / josé martínez

Luis Carrión estrenó en el feudo del líder un sistema con cinco zagueros y parece que su apuesta se mantiene en firme pese al batacazo y los tres goles encajados en la derrota ante el Levante. Con la duda de Antoñito y Héctor Rodas, que ayer tampoco trabajaron con un grupo al que se espera que se sumen hoy, el técnico está decidido a dar continuidad al dibujo ante el Alcorcón con el propósito de conseguir dejar la portería a cero casi dos meses después y acercar así una victoria que se resiste en lo que va de 2017. Esa intención se dejó entrever en la última sesión semanal a puerta abierta con un partidillo a algo más de medio campo en la fase final, aunque a buen seguro que será en los dos entrenamientos sin público que restan para el encuentro cuando el preparador del Córdoba insista de manera más concienzuda en unos conceptos que se notaron aún algo verdes en el Ciutat de Valencia.

En la búsqueda continua de soluciones en la que se encuentra prácticamente desde su llegada, Carrión probó ante el líder de la categoría un 5-3-1-1, alineando prácticamente a todo lo que tiene disponible en la parcela defensiva. Rodas actuó de libre, escoltado por Caro y Cisma para dejar los carriles a Antoñito y Bíttolo. Ese nuevo sistema transmitió en buena fase del encuentro una mayor sensación de seguridad, aunque no evitó llegadas muy claras del conjunto granota y tampoco sus tres tantos. Como contraprestación, y tirando la típica teoría de la manta corta, el equipo mostró muy poco mordiente en ataque, donde Rodri se vio muy alejado de la segunda línea y apenas Juli hizo daño con libertad de movimientos. Virtudes y defectos que deberían priorizar lo primero con una mayor acumulación de entrenamientos y partidos, sobre los que parece que insistirá el técnico este fin de semana.

La vuelta de Aguza abre las alternativas en la medular; Rodri o Pio, la duda en el ataque

De momento, todo pasa por ver si Rodas y Antoñito estarán listos para recibir al Alcorcón. A tenor de la falta de parte médico de ambos, lo normal es que hoy se incorporaran al grupo tras estar fuera también en la sesión de ayer. De ser así, el valenciano cerraría de nuevo la defensa, en una posición en la que durante la prueba se situó Luso, sancionado el sábado, y el sevillano ocuparía un carril diestro al que oposita también Pedro Ríos, elegido para tal demarcación en su ausencia. Soluciones para tratar de dejar la puerta a cero, algo que el Córdoba no consigue desde la visita del 7 de enero del Rayo que tampoco sirvió para ganar (0-0). Sin embargo, todos en el vestuario coinciden en que es el camino más corto para sumar el primer triunfo del nuevo año y romper la peor racha de siempre en casa en la categoría de plata.

A eso debe ayudar también el trabajo del resto del equipo. De medio campo hacia adelante, Carrión tiene bastantes más alternativas, sobre todo ahora con la recuperación de Aguza tras su sanción. El medio catalán, titular desde su llegada, parece fijo en la alineación junto a un Edu Ramos que siempre ha tenido el beneplácito del entrenador, por lo que lo normal sería que ocupara el puesto de Caballero. Para Javi Lara sería el puesto libre de la medular, quedando Juli como enganche con total libertad de movimientos por detrás del delantero referencia, que podría volver a ser Piovaccari.

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