La Gerencia de Urbanismo autorizó ayer, 29 de diciembre, el grueso de las fiestas que se celebrarán en Nochevieja fuera de lugares donde se llevan a cabo habitualmente actividades de ocio. El organismo municipal, que tenía siete peticiones encima de la mesa, autorizó ayer cuatro fiestas que se suman a una quinta que recibió el visto bueno el pasado viernes (la del hotel Las Adelfas). En total, Urbanismo ha emitido un aforo máximo conjunto de 2.933 personas. Se trata de un dato relevante. La mayor parte de los problemas que se tienen registrados en los cotillones, como el que tuvo lugar en el hotel Hesperia, se deben a que se venden muchas más entradas de las que, en realidad, están permitidas.

Según el comunicado de Urbanismo, al hotel Las Adelfas se le ha autorizado una fiesta de 310 plazas, el Club Hípico tiene un aforo máximo de 900 personas, la fiesta del Córdoba Center contará con 414 comensales como máximo mientras que el Club Figueroa tendrá, a lo sumo, 831 plazas. El aforo se encuentra fijado por el espacio disponible para desarrollar la fiesta y las condiciones objetivas del edificio, de forma que se pueda asumir sin problemas la cantidad prevista de personas. Durante la tramitación de los permisos, la Gerencia ha obligado a alguna de las fiestas a modificar a la baja el número de entradas que se solicitaban ante la limitación del aforo del local.

Urbanismo ha informado de que uno de los permisos que se habían solicitado, el del restaurante Dino's, ha sido retirado, mientras que la solicitud de la Hacienda La Albaida aún se encuentra en estudio. Este expediente comenzó a tramitarse el pasado día 26, según la Gerencia. Este año, Urbanismo se ha enfrentado a críticas por parte de los organizadores de fiestas por la tardanza en conceder los permisos definitivos. El organismo municipal ha asegurado que son los solicitantes quien han entregado tarde la documentación.

La mayor parte de las fiestas nocturnas que se celebran en la ciudad esa noche no disponen de permiso porque no lo necesitan. Los locales nocturnos tienen un horario especial en el que pueden tener abiertas sus puertas dos horas más del horario normal. El permiso de cotillón, que antes del cambio de la ley se tramitaba por la Delegación de Gobernación de la Junta de Andalucía, está pensado para locales que vayan a celebrar una fiestas de estas características alterando sustancialmente su normal funcionamiento. El número de cotillones ha disminuido de forma notable en los últimos años. Ahora se encuentra ligado a empresas de organización de fiestas que alquilar salones de hoteles o clubes recreativos para desarrollar estas fiestas.