El Sindicato Médico (Simec) acordó ayer en asamblea la suspensión temporal de la convocatoria de huelga iniciada en enero por los recortes y que estaba previsto que concluyera el próximo mes de junio. Los facultativos esperan que esta decisión sirva para abrir un nuevo proceso de diálogo con la Consejería de Salud y alcanzar acuerdos en pro del colectivo de profesionales.

Este anuncio se produjo ayer coincidiendo con la finalización de la primera ronda de paros en todas las provincias andaluzas, lo que, según explicó el presidente del Sindicato Médico en Córdoba, José Luis Navas, "nos ha dado una visión muy fiel de la situación en la que se encuentran el personal sanitario". No obstante, reconoció que el seguimiento de las convocatorias "no ha sido masivo", aunque insistió en que esta circunstancia se ha debido sobre todo a a las "excesivas" presiones por parte de la Consejería de Salud, la situación de "inestabilidad" del personal y por los "desmesurados" servicios mínimos impuestos. Al mismo tiempo, destacó el apoyo de los galenos en todas las asambleas convocadas hasta ahora así como en las manifestaciones a las puertas de los centros sanitarios.

Tras esta decisión, queda suspendido el calendario de paros fijados por el Simec en todas las provincias Andaluzas para las próximas semanas. De este modo queda desconvocada la jornada de huelga prevista para mañana en Córdoba y que afectaría al Hospital Universitario Reina Sofía, el Distrito Córdoba Centro, el Distrito Guadalquivir, EPES 061 y el Centro de Transfusión Sanguínea. Según señaló Navas, "los facultativos tendemos nuestra mano abierta al Servicio Andaluz de Salud", de modo que en las próximas semanas el Simec decidirá si desconvoca definitivamente la huelga "si obtenemos una respuesta favorable de Salud", o si por el contrario vuelven a retomar sus acciones "porque no hemos alcanzado ningún acuerdo".

Los facultativos se encuentran en un clima favorable para la negociación, ya que, tal y como expresó el presidente del Simec, en las últimas semanas la consejera de Salud, María Jesús Montero, "ha expresado su interés por buscar una mejora de la situación del personal temporal", una de las mayores demandas del sindicato. Asimismo, señaló que los directores gerentes de varios centros sanitarios han mostrado "una mayor flexibilidad" para la aplicación de la jornada de 37,5 horas semanas por parte de los trabajadores.