La primera vendimia del territorio europeo arranca oficialmente este jueves en la comarca Montilla-Moriles, una zona productora que debido a su peculiar climatología y a las variedades que cultiva tiene el honor de abrir el periodo de recolección de la uva en el viejo continente. De hecho, este temprano arranque en la corta de la uva respecto a otros territorios de la UE es una detalle que no pasa desapercibido para el sector vitivinícola, como ayer pusieron de manifiesto entidades como la asociación agraria Asaja o la Cooperativa La Unión de Montilla, la mayor de Andalucía, según apuntan sus responsables.

La Unión informó ayer de que se recolectarán las variedades de uva blanca Sauvignon Blanc y Chardonnay, ya que tras un seguimiento de madurez y calidad durante varias semanas, ha llegado el momento óptimo para su vinificación. Según el enólogo de la sociedad montillana, José Garramiola, "la calidad de la uva es excelente y esperamos obtener esta campaña unos caldos inmejorables para nuestro Blanco Joven Algarabía".

Los socios de La Unión esperan recoger su fruto desde hoy hasta finales de septiembre siguiendo los controles de maduración para que toda su uva, fruto de todo un año de trabajo, sea vinificada con la mejor tecnología: "desfangados en frío, fermentación a baja temperatura, maceraciones adecuadas y el esfuerzo de sus trabajadores y técnicos se traduzca en grandes vinos, jóvenes, blancos, rosados y tintos".

La cooperativa indicó que en esta vendimia se observa un ligero retraso respecto al año pasado, "debido fundamentalmente al año climatológico que llevamos en curso, escasas precipitaciones, altas temperaturas, pero aun así, la uva presenta una calidad excelente, buen estado sanitario y un grano más pequeño".

Como ya adelantó El Día, la Denominación de Origen Montilla Moriles vaticina que la producción de la vendimia de este ejercicio será un 25% inferior respecto a la del año anterior. El vicepresidente del Consejo Regulador Montilla Moriles, Juan Manuel Centella, precisó que la producción de uva bajará de los 40 millones de kilogramos que se recolectaron el año pasado a unos 32 millones de kilogramos que se prevé recoger esta campaña. Ese volumen de fruto tendrá su repercusión en la producción final de vino, que será de unos 21 millones de litros, lejos de los 28 millones que la comarca vitivinícola cordobesa de Montilla-Moriles generó durante la campaña pasada.

La Denominación de Origen pronostica que el vino que el Pedro Ximénez (px) será de nuevo el que acapare más producción y se mantendrá de nuevo como la joya de la corona de la DO, puesto que la climatología de la Campiña convierte a la comarca en un espacio único para la elaboración de estos caldos. Esta caída en el volumen de uva repercutirá negativamente en el número de jornales durante el periodo de vendimia comentó Juan Manuel Centella. La superficie de esta denominación de origen dedicada a la vendimia se mantiene tal y como otros años, con unas 5.600 hectáreas aproximadamente.

Asaja Córdoba también indicó ayer que las variedades de vinos jóvenes Chardonnay, Sauvignon Blanc y Moscatel producirán los primeros mostos de la campaña 2012, a las que le seguirán las variedades tintas y finalmente la recolección de las uvas de la variedad autóctona, la Pedro Ximénez. Desde Asaja Córdoba prevén un descenso de la producción en comparación con la campaña anterior debido en gran parte a la climatología adversa, ya que ha sido un año muy seco con picos de altas temperaturas.