Rosendo. Rockero

"A mis conciertos vienen los padres con los hijos y están a punto de venir los nietos"

  • El cantante madrileño ofrecerá un concierto este sábado en el Teatro de la Axerquía en el que revisará sus temas más célebres. Dedicará el próximo año a su nuevo disco.

El Festival de la Guitarra ha mostrado siempre predilección por los grandes veteranos de los escenarios. Este año convoca a uno de los referentes en la historia del rock español, Rosendo Mercado (Madrid, 1954), que actuará el próximo sábado en el Teatro de la Axerquía (22:30) en el marco de su gira Mentira me parece, teloneado por el grupo cordobés Hijos del Hambre.

-Regresa al festival después de muchos años...

-Sí. Creo que es uno de los festivales potentes, y además como guitarrista estoy orgulloso y encantado de estar ahí porque en el programa hay muy buenos guitarristas.

-¿En qué se diferencian estos festivales de aquellos que usted recorría en sus inicios? ¿Cómo han cambiado?

-Han evolucionado a todos los niveles, en infraestructuras, en producción... Ahora mismo en el 90% de los festivales potentes da gusto estar, es otro mundo comparado con lo que veíamos hace algunos años.

-¿El público del rock se ha renovado o los aficionados siguen siendo los que eran?

-Hay mucha gente joven que se ha enganchado. Yo me sorprendo cuando veo la cantidad de chavales jovencillos que están en la onda nuestra. En general, la gente joven en la música es fundamental, es necesaria y todos lo hemos entendido así.

-Usted además ha logrado mantener una legión de seguidores fieles durante décadas...

-Sí, supongo que se debe a la constancia, en mi caso son muchos años y creo que no he dado demasiados palos de ciego, he sido constante en mi forma de hacer, tanto en las épocas buenas como en las malas, ahí aguantando al pie del cañón... Creo que todo eso se valora. Hay mucha gente que nos sigue. A mis conciertos vienen los padres con los hijos y están a punto de venir los nietos.

-¿Qué estímulos sigue encontrando en un escenario?

-La gente. Uno tiene que ser realista cuando toca en directo. Yo me planteé la música como una forma de vida, como una profesión, y llevo cuarenta años funcionando, poco a poco pero afortunadamente cada vez mejor. Es lo más grande que me podía pasar. Estoy encantado.

-¿La edad le ha hecho ser más escéptico?

-Yo creo que sí, pero depende... Porque por otra parte me siento ingenuo en algunos aspectos. Los años te van enseñando muchas cosas y te hacen creer menos en otras.

-¿Cómo está la industria musical?

-Es un desastre. Se está viendo desde hace diez o quince años. Internet fue un palo importante y a partir de ahí la industria se vino abajo, los discos no se venden, esto ha provocado que los estudios de grabación tampoco vayan bien... Es una cadena que ha ido perjudicando a una profesión entera. Pero es lo que hay y además no hay vuelta atrás. La industria se está reinventando constantemente para subsistir de alguna manera. Los músicos afortunadamente tenemos el directo, que es lo que nos mantiene. Pero ha sido una debacle absoluta.

-Y con muchos artistas y grupos que se han quedado en el camino. ¿Eso potencia el mérito de los que siguen durante tanto tiempo?

-Yo entiendo que el que se lo cree y pelea por ello aguanta hasta que el cuerpo diga "hasta aquí he llegado". Pero cada caso es un mundo y hay quien lo ve de otra manera.

-¿De esta crisis de la industria musical ha salido reforzado el directo?

-Es lo que se comenta, que el directo ha ido a más, y quizá sea verdad. La ventaja de Internet es que todo se comunica inmediatamente y sobre todo la gente joven está muy pendiente de todo y se entera rápidamente de lo que hay. Esto le ha dado vidilla al directo. Es cierto que hay muchísimos conciertos por toda España y mucha gente en la mayoría de ellos.

-¿Qué va a ofrecer el sábado en Córdoba?

-Estamos haciendo un poco repaso general, una gira que ya va para dos años con el último disco. El repertorio ha ido cambiando, el año pasado hacíamos mucho hincapié en los temas del último disco y ahora me he liado la manta a la cabeza y he sacado un repertorio un poco más de clásicos, temas que yo sé que gustan a la gente y que le apetece escuchar en directo.

-¿Cómo se le presenta el verano?

-Bien, en la carretera. Estamos trabajando muy bien, se siguen firmando cosas para julio y agosto y creo que vamos a tener un año importante.

-¿Algún proyecto discográfico?

-El año que viene quiero dedicarme a preparar disco nuevo. Un poco lo de siempre, con más años a cuestas pero bien.

-¿Cómo ve el futuro? ¿Es optimista?

-Quiero serlo. De hecho, siempre lo he sido, a pesar de que digo un poco lo que hay, lo que veo y lo que siento. Quiero pensar que hay luz al final del túnel. Pero también hay que pelear.

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