El Festival de la Guitarra celebró ayer su presentación social con llamadas a la unión institucional en torno a la cultura (sobre todo, por parte del alcalde, José Antonio Nieto) y elogios repetidos por el grado de prestigio que ha alcanzado un acontecimiento que cumple 32 ediciones y que en su género es "el mejor del mundo", según el concejal de Cultura, Juan Miguel Moreno Calderón. El reto para este año era, a pesar del descenso presupuestario, mantener los niveles de cantidad y calidad de los anteriores. Un desafío que los organizadores consideran superado gracias, en parte, a la comprensión y la receptividad de los artistas y representantes.

La sala Polifemo del Teatro Góngora acogió una presentación que contó con la participación del guitarrista José Antonio Rodríguez, que el 12 de julio (el festival se celebra del 3 al 14) presentará en el Gran Teatro su último disco, Anartista, recientemente publicado. Veintiocho espectáculos forman parte de una programación en la que están incluidos Serrat & Sabina, Amaral, Miguel Poveda, Saratoga, Jethro Tull, Egberto Gismonti, Niño de Pura, John Scofield, la Orquesta de Córdoba, el Ballet Flamenco de Andalucía, Luis Delgado, Ricardo Gallén, Eliot Fisk y Manuel Barrueco. Las sedes serán el Gran Teatro, los dos escenarios del Góngora y el Teatro de la Axerquía.

Un festival preparado "con mimo", según el alcalde, que no obstante reconoció que ha habido "cosas que no se han podido hacer y que se harán en próximas ediciones". Nieto destacó la "lealtad" y el "ánimo" con que la Junta de Andalucía y el Ministerio de Cultura se involucran en el acontecimiento, junto a Casa Árabe y las firmas patrocinadoras (Cruzcampo, Gas Natural Fenosa y Renfe). Por un lado, reclamó, "hay que mantener la unidad y la colaboración en torno a la cultura"; por otro, "no es posible ahora mismo y no lo va a ser durante mucho tiempo organizar grandes eventos culturales sin el apoyo de patrocinadores privados". "Ninguno de los artistas que vienen este año al festival está devaluado, a ninguno hay que presentarlo y todos están preparados para actuar en cualquier ciudad del mundo", concluyó, optimista, el alcalde.

Moreno Calderón tuvo un recuerdo agradecido para Paco Peña, que puso en marcha los encuentros con la guitarra en 1981, "cuando ya ni siquiera vivía en Córdoba". El Ayuntamiento adoptó el invento y aunque en este tipo de festivales consagrados a un instrumento "es difícil encontrar la fórmula" que le garantice la estabilidad, el de Córdoba "hace tiempo que halló su dimensión y un esquema que viene funcionando bien y le ha dado prestigio a la ciudad". En los últimos años, sobre todo, ha delimitado "una línea muy clara" que le otorga un carácter estable en el que siguen cabiendo las innovaciones. En esta edición, el ciclo de clásica incorpora el programa Cordofonías, dedicado a los instrumentos que están emparentados con la guitarra. Y se pone en marcha un proyecto que consiste en encargar a grandes compositores una obra específica para este acontecimiento. Así, la Orquesta de Córdoba inaugurará la cita con el estreno del Concierto de Córdoba de Tomás Marco.

"Todos los grandes guitarristas del mundo en todos los estilos han pasado por Córdoba y seguirán pasando", indicó Moreno Calderón.

La delegada del Gobierno andaluz, Isabel Ambrosio, afirmó que "desde que se inició, el festival no ha hecho otra cosa que crecer y mejorar", mientras que el subdelegado del Gobierno, Juan José Primo Jurado, subrayó que "en estas dos semanas de julio Córdoba se convierte en un referente turístico y cultural" gracias a un acontecimiento que presenta "un nivel exquisito y admirable en tiempos difíciles".