Finales de 2018. Ésa es la fecha aproximada que se baraja para la apertura del nuevo hotel que el Grupo Insur y Hotusa han proyectado en el Casco Histórico, en el edificio de la antigua sede de Endesa que se sitúa entre las calles Alfonso XIII y García Lovera. Las obras han comenzado esta misma semana, tal y como publicó ayer este periódico, y los plazos que manejan tanto los propietarios como la cadena hotelera es que el nuevo establecimiento pueda abrir sus puertas en un máximo de dos años.

El hotel se ha concebido como un espacio de cuatro estrellas que albergará un total de 45 habitaciones que se sumarán a la oferta hotelera de la capital. La empresa Demoliciones Córdoba ya ha iniciado los trabajos previos y ha desplazado personal y los primeros camiones a la zona. Tanto el jefe de obra como algunos operarios actúan ya sobre el terreno con el objetivo de ultimar el proyecto y poder así enviar a todo el personal y el resto de maquinaria necesaria para las tareas de demolición, previas a las obras del futuro edificio.

La puesta en marcha de este establecimiento supondrá el incremento de la oferta en el Casco Histórico, una de las zonas más demandadas por las turistas para alojarse. La falta de camas y de hoteles de alta calificación -de cuatro y cinco estrellas- ha estado de actualidad por las críticas de colectivos turísticos como es el caso del clúster Fides, que ya advirtió de que Córdoba es la penúltima provincia de Andalucía con menos plazas hoteleras, sólo por delante de Jaén. El estudio de Fides se centra en la oferta de los hoteles de cuatro y cinco estrellas, destaca que Córdoba tiene la quinta parte de plazas en ese tipo de establecimientos de Granada y Sevilla e insiste en la necesidad de crear el doble de plazas de las que actualmente hay en esos hoteles de cuatro y cinco estrellas, especialmente en la capital. Concretamente, de las 8.230 plazas, la provincia dispone de 3.058 repartidas en 18 establecimientos de cuatro estrellas y 400, en sólo dos de cinco estrellas.

La puesta en marcha del hotel contribuirá al desarrollo del Casco Histórico, una parte de la ciudad que en los últimos años ha sufrido una gran transformación con la peatonalización y la próxima semipeatonalización de la zona de Capitulares, muy próxima. El establecimiento se ha proyectado tras un acuerdo entre la cadena hotelera y la propietaria del inmueble, el Grupo Insur, y entra dentro de los planes de expansión de Hotusa entre los años 2016-2020.