Esa asignatura que se atasca y que no hay forma de sacarla adelante por mucho que se estudie, se intente y para la que ya no hay opción alguna más de examinarse. Esa asignatura que es imposible aprobar pero que es la que impide al estudiante de turno obtener el título de grado final. Pues para ellos, en las universidades hay un reglamento de evaluación por compensación. Se trata de la última oportunidad que se da al alumno en cuestión para que, de una vez por todas, acabe su titulación y pueda conseguir su acreditación final.

La Universidad de Córdoba (UCO) también dispone de su propio reglamento de evaluación por compensación, con el que se pretende "dar solución a situaciones académicas particulares y específicas derivadas de circunstancias académicas singulares y excepcionales", según viene recogido en el mismo.

Este sistema, continúa el documento que aparece publicado en el Boletín Oficial de la UCO, "se conceptúa como una vía procedimental que permite evitar situaciones en las que la no superación de alguna asignatura, impida o demore de forma desproporcionada la obtención de un título de grado cuando la trayectoria académica global del estudiante permita corroborar la consecución de los objetivos y la adquisición de las competencias de grado que curse".

En definitiva, lo que ofrece este sistema es "una evaluación curricular global para determinar si el estudiante está en posesión del conjunto de conocimientos y competencias necesarios para la obtención de su título de grado y para poder desempeñar la profesión correspondiente de forma adecuada y garantista, pese a no haber superado un reducido número de créditos de su plan de estudios". En el reglamento, además, se deja bien claro que la evaluación por compensación en el seno de la Universidad de Córdoba solo se admite en los grados.

Requisitos

Para poder acceder a este sistema de "gracia", el estudiante tiene que cumplir una serie de requisitos. Entre ellos, tener pendiente solo una asignatura, básica, obligatoria y optativa en el momento de solicitar la compensación.

Además, hay que tener en cuenta también el hecho de que el alumno que lo solicite tiene que haber cursado, al menos, el 75% de los créditos de la titulación en la UCO y el 25% en otra institución académica. A ambos requisitos hay que añadir el hecho de que el alumno haya agotado las seis convocatorias de examen de la asignatura. No obstante, el reglamento de la Universidad de Córdoba recoge también que se admitirá que el hecho de que las convocatorias consumidas sean cinco cuando se trate de asignaturas pertenecientes a los dos últimos cursos del grado.

Otra de las limitaciones establecidas es que el estudiante solo podrá pedir dos veces como máximo esta evaluación por compensación de una asignatura; además, entre la primera y segunda solicitud se debe agotar una convocatoria más. Es más, cada petición tiene que llevar acompañada una memora justificativa de los motivos excepcionales.

Una vez presentada la citada solicitud, será una comisión de evaluación de la UCO la que se encargue de analizar la misma. Esta citada comisión tendrá un periodo de dos meses para emitir su resolución. 

Además, los integrantes de esta comisión tienen la potestad de pedir un informe técnico al departamento al que pertenece la asignatura, que ha de reflejar el nivel de rendimiento de la misma, así como cuantas notas, evaluaciones de ejercicios, exposiciones y exámenes consten.

Para su resolución final, la comisión tiene que valorar la trayectoria académica global del estudiante. Por cierto, que de esta comisión no puede formar parte ningún profesor que haya participado en la docencia de la asignatura. Otro de los requisitos que debe cumplir esta comisión es que no puede realizar pruebas de evaluación de carácter adicional.