Una decena de ayuntamientos han decidido retirar de marquesinas y soportes publicitarios la polémica campaña de la Asociación Católica de Propagandistas (ACdP) que anima a "rezar" ante las clínicas abortistas, al considerar que vulnera los derechos de las mujeres, aunque otros, como Córdoba, la van a mantener.

Los controvertidos carteles, con el lema "Rezar frente a las clínicas abortistas está genial", se colocaron en 250 soportes de 33 ciudades, en respuesta a la proposición de ley que se tramita en el Congreso para penalizar el acoso a las mujeres y los trabajadores de las clínicas que practican las interrupciones voluntarias del embarazo.

Para la ministra de Igualdad, Irene Montero, resulta "perverso" hablar de rezar frente a las clínicas cuando en realidad "están acosando, perjudicando y dificultando el acceso de las mujeres" a ejercer el derecho al aborto.

Frente a los consistorios que han decidido pedir a las empresas concesionarias de los soportes publicitarios que la campaña sea retirada, otros han rechazado públicamente tomar esa medida.

Por su parte, el alcalde de Córdoba, comentó que está campaña se basa en la libertad de expresión, igual que tendría cabida una en sentido opuesto. “Habrá gente que le guste y que no le guste, pero en España lo que no podemos es coartar la libertad de expresión". En cualquier caso, ha precisado, que "por supuesto, que se puedan generar opiniones a favor o en contra de determinadas leyes que es, al final, lo que esa campaña está haciendo”.

El regidor indicó que “buscar más allá no tiene sentido porque los espacios publicitarios están a disposición de quien quiera, igual que hoy hay una campaña en ese sentido, si el día de mañana viniera una campaña en el sentido absolutamente contrario, donde defendiera esa legislación, otra visión opuesta, también tendría abierta las puertas de la publicidad para poder hacerlas”. A su juicio, “no hay que alentar polémicas donde no existen”. 

"Lo único que hay claro es que hay unas normas que hay que respetar, que son las Ordenanzas de Publicidad Exterior, que esa campaña no la incumple en ningún sentido”. Expresó el alcalde que también indico que “hay otro argumento más de peso y es que el pleno del Ayuntamiento ya se posicionó ya en contra de este tema”, al rechazar la legislación que critica la campaña.

Reacción a nivel nacional

El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha considerado que el Ayuntamiento no tiene competencia para juzgar la opinión del anunciante, mientras que el Ayuntamiento vigués, encabezado por el socialista Abel Caballero, ordenó la retirada al considerar que se trataba de "propaganda sexista contraria a los derechos constitucionales", según fuentes municipales.

Una campaña "repulsiva" y "asquerosa", según el consistorio de Pontevedra. Según explicó su portavoz, Anabel Gulías (BNG), un ayuntamiento "feminista" no tolerará iniciativas que "atentan contra la capacidad de decisión de las mujeres" sobre sus cuerpos.

En Vitoria, el Ayuntamiento, liderado por el PNV, encargó un informe al Instituto Vasco de la Mujer, Emakunde que estimó que se podía vulnerar "el derecho de las mujeres a la protección de la salud sexual y reproductiva, el derecho fundamental a la intimidad personal y familiar y al derecho a la integridad física y moral de las mujeres".

En el municipio madrileño de Getafe también se van a retirar estos mensajes publicitarios pero en este caso, porque el tiempo de exposición contratado por la empresa anunciadora terminaba el pasado martes.

No obstante, la teniente de alcalde de la localidad madrileña, Alba Leo (Podemos), ha publicado un tuit en el que confirma que se van a retirar esos mensajes antiabortistas de las marquesinas y agradece al movimiento feminista su denuncia de los mismos.

Ya la semana pasada, el Ayuntamiento de Murcia, encabezado por el PSOE, confirmó la retirada de la polémica campaña. La concejala de Igualdad y Juventud, Teresa Franco, consideró "una pena" que haya asociaciones que ejerzan esta "forma de violencia hacia las mujeres criminalizando un derecho como es la capacidad de decidir si ser madre o no".

La orden de retirada de los carteles también se ha dado en Gijón, Granada, Valencia y Valladolid, cuyo Ayuntamiento está estudiando imponer una sanción a la empresa concesionaria de la publicidad en las marquesinas por haber instalado esta campaña sin contar con el visto bueno previo del supervisor del contrato, un paso previo obligatorio.

En un comunicado, la asociación e-Cristians ha tachado estas medidas de "censura", "un ejemplo de la cultura de la cancelación" que huye del debate y busca callar al interlocutor multándole o amenazándole.

"El lobby ultra arremete por tierra, mar y aire contra el derecho al aborto. Sus redes son poderosas, pero somos mayoría quienes defendemos la soberanía de las mujeres sobre nuestros cuerpos. Blindar los derechos humanos sí que está genial", ha manifestado a través de las redes sociales la directora del Instituto de las Mujeres, Antonia Morillas.