Carlos Caballero es el pasajero número 25 del Córdoba de Primera División. El centrocampista madrileño tuvo un estreno testimonial en la élite el pasado domingo en el Martínez Valero. Corrían los últimos minutos del encuentro en Elche cuando Miroslav Djukic ordenó la entrada en el partido del ex del Cádiz. Sólo fueron dos minutos los que dispuso, pero Caballero ya debutó con el conjunto cordobesista tras una larga lesión que lo ha tenido apartado de los terrenos de juego más de ocho meses.

Atrás quedaba la rotura del ligamento anterior de su rodilla izquierda que el 24 de febrero, un día después de jugar contra el Real Jaén, sufrió el talentoso jugador blanquiverde. Fue en un encontronazo con Obiora en la sesión de trabajo del equipo y rápidamente se confirmaron los peores augurios. Tras sufrir varios meses en silencio y trabajar apartado del grupo, Caballero vio la luz al final del túnel cuando disputó 59 minutos en el amistoso ante el Lucena del pasado 9 de octubre. En esa cita, fue el capitán del equipo cordobesista y se colocó en la línea de mediapuntas, tal y como sucedió en la recta final del pasado domingo en el Martínez Valero. Antes tuvo la ocasión de estar en varias convocatorias, aunque nunca llegó a jugar. Ahora vuelve para quedarse, porque es un jugador de gran calidad y que puede aportar mucho al equipo del preparador balcánico. Él lo sabe y es sólo cuestión de trabajo. Ya está aquí y poco a poco tendrá más minutos de juego.

Con el ingreso en el terreno de juego de Carlos Caballero, ya son 25 los jugadores que han sido utilizados por Albert Ferrer y Miroslav Djukic. Sólo Saizar es el único que aún no ha gozado de ningún minuto en las 12 jornadas que se llevan disputadas de Liga. El cancerbero vasco perdió su sitio la pasada temporada cuando se lesionó ante el Sabadell. Desde ese momento, Juan Carlos se adueñó de la portería cordobesista, siendo muy del gusto de Albert Ferrer. El técnico catalán apostó siempre por él y en este curso en la élite no tuvo ninguna duda en darle de nuevo la oportunidad. De hecho, el club no buscó ningún portero en el mercado. Con Juan Carlos en la portería, Saizar se quedó siempre en el banquillo y esperará su oportunidad en la Copa del Rey para poder estrenarse este ejercicio. Todo parece indicar que el meta vasco tendrá minutos en la eliminatoria copera frente al Granada, un duelo que disputará la ida dentro de siete días en Los Cármenes. Una buena piedra de toque para que Djukic vea al de Ibarra bajo los arcos de la portería cordobesista. El técnico serbio, a pesar de las dudas que ha dejado en varios choques Juan Carlos -como en el Vicente Calderón- se ha mostrado firme en la apuesta por Juan Carlos. El alcarreño lo ha jugado todo, sumando 1280 minutos en los 12 encuentros que se llevan disputados y donde ha encajado 20 goles. Aunque no es el único que lo ha jugado todo, Íñigo López es el otro referente cordobesista. El defensor riojano es básico para los planes de Djukic, al igual que lo fue para Ferrer. El ex del Celta también ha gozado de todos los minutos, viendo como sus compañeros de zaga han ido cambiando. De hecho, este domingo tendrá que cambiar de nuevo, una vez que Pantic no puede jugar por una cláusula contractual. El serbio llega cedido por el conjunto de Marcelino, lo cual deja una vía abierta para Iago Bouzón.

Tras Íñigo López y Juan Carlos, Fede Cartabia ha jugado 11 envites (915 minutos), anotando tres goles. El argentino es el máximo goleador del equipo, igualado con Nabil Ghilas. Ahora Djukic buscará que el de Bombal de lo mejor de sí a un CCF que necesita la mejor versión del jugador cedido por el Valencia. Como Caballero, Fede es un jugador diferente y de sobrada calidad. Ambos son dos jugones que deben conectar para que el CCF conquiste al final la ansiada permanencia.