A sus 23 años, Carmen Romero no deja de cosechar éxitos, algo que no resulta extraño tras una vida dedicada en cuerpo y alma al atletismo. A pesar de los halagos, la atleta de Añora mantiene los pies en el suelo. Nadie le ha regalado nada, y sabe que el esfuerzo es la constante que marca su día adía, más si cabe tras lograr el oro en el Campeonato de España Absoluto.

-Esta medalla de oro, muy trabajada, al recuperar la desventaja respecto de sus rivales, ¿qué supone a nivel personal como deportivo?

-A parte de dar un gran salto, a nivel cualitativo, este oro me da la confianza necesaria para no ponerme ninguna barrera en mi carrera deportiva y pensar, con la temporada ya acaba, en proponerme nuevos objetivos mucho más altos.

-¿Con qué sensaciones llegó al Campeonato de España?

-La verdad es que no tenía claro en que estado de forma llegaba al campeonato, porque era ya la última gran competición que disputaba y había sido una temporada muy larga. Esta era mi quinta combinada de este año, y eso para una atleta son muchísimas pruebas, porque la exigencia siempre es máxima. Por estos motivos, llegué un poco insegura a la competición, porque me veía bien en los entrenamientos, pero no sabía el nivel al que podría llegar. Pero luego, conforme fueron avanzando las pruebas me sentí bastante bien y pude corroborar que sí estaba en forma.

-¿Esperaba lograr el doblete?

-El doblete no era, a priori, el objetivo marcado. Mis metas principales de este año eran realizar un buen papel en el Campeonato de Europa y subir al podium en éste, pero no tenía idea de que pudiera salir campeona.

-Ha conseguido su mejor marca personal, pero ¿era este el objetivo previsto?

-En principio, no era mi objetivo prioritario. En Madeira, es cierto que ya conseguí importantes marcas personales en vallas y en 200 metros, entonces tenía claro que si todo salía cómo lo había estado entrenado, mi mejor marca personal podía darse. Así que, aunque no era la meta perseguida, no me ha pillado de imprevisto este logro personal.

-Entonces, ¿qué es más importante, batir las marcas o colgarse las medallas?

-Sin duda, para mí son los registros personales, pero sobre todo, lo realmente importante es conseguir todas las marcas personales en una misma competición. Porque esta disciplina consta de siete pruebas, entonces para lograr que todas salgan bien en una misma competición es muy difícil, ya que tienes que estar plenamente concentrado y, además, que todo salga perfecto y no surja ningún imprevisto para lograr esas marcas que estás buscando.

¿Con qué momento se queda del Campeonato?

-Me quedo con la prueba de los 800 metros, sin duda. Porque tuve una sensación un tanto agridulce, al no poder conseguir realizar mi marca personal en esta prueba, pero al mismo tiempo la recuerdo con alegría, ya que en ella logré imponerme a mis rivales directos.

¿Cree que esta prueba fue decisiva para poder lograr la victoria? ¿Sufrió mucho durante la carrera?

-Sí, fue la prueba decisiva. Además, en esta carrera sufrí muchísimo, más que nunca. Tenía unas ganas inmensas de llegar a meta, se me estaba haciendo larguísima. Lo pasé fatal pero. finalmente, el gran esfuerzo que realicé tuvo una enorme recompensa.

-Por otro lado, ¿en qué pruebas se encuentra más preparada y en cuáles no tanto?

- En las pruebas en las que me siento más cómoda son los 800 metros y el salto de altura, sobre todo en esta última, porque hace mucho tiempo que la llevo preparando con mi grupo de entrenamiento. Además, el salto de altura es el ejercicio en el que empecé en esta disciplina. En un principio, no pensé en comenzar con las pruebas combinadas, por ello el salto de altura es mi especialidad. Luego, las que más me cuestan en estos momentos son el lanzamiento de peso, que aún no le acabo de coger la técnica, y salto de longitud.

-Su formación ha sido crucial para lograr los objetivos. Por ello, ¿qué opinión tiene de su entrenador, Enrique Márquez, y de sus compañeros del CAEP Soria? ¿Qué destaca de este grupo de trabajo?

-Estoy encantada con ellos, porque además de ser un grupo extraordinario, algo fundamental para el trabajo diario, son mi mayor apoyo en los momentos bajos. Me aportan mucho valores, incluso fuera del atletismo. Respecto a Enrique, él lo es todo. A parte de ser mi entrenador, él es gran responsable de mis éxitos, porque además de enseñarme a realizar los ejercicios, actúa también como mi psicólogo para concienciarme en cumplir los objetivos.

-Después de esta temporada carga de éxitos, ¿qué objetivos se marca para el futuro?

-La verdad es que ahora no pienso en nada, sólo en descansar y desconectar de todo. En el momento que empiece la nueva temporada, será cuando trace los nuevos objetivos a batir.

-¿A quién dedica este triunfo?

-Se lo dedico a mucha gente, ya que el éxito logrado ha tenido muchos protagonistas. Pero, sobre todo, se lo brindo a mi familia, a mis amigos, a mi grupo de entrenamiento, a mi técnico y al centro deportivo CAEP Soria.

-A pesar de ser una deportista muy joven, ¿qué recuerda de sus inicios?

-Tengo un gran recuerdo de mis inicios, porque me ha dado la posibilidad de conocer a mucha gente y viajar mucho. Pero sobre todo, la imagen que guardo en mi retina es el aprendizaje adquirido, sin duda.

-¿Qué mensaje mandas a los que comienzan?

-A los empiezan les recomiendo que disfruten, porque luego cuando ya se está en la élite la exigencia es máxima, porque te metes de lleno en la competición y se buscan otros objetivos. También, a los mayores, les digo que con constancia y esfuerzo se consiguen los todos los objetivos.

Por último, ¿has recibido muchas felicitaciones y mensajes de cariño?

-Sí, sobre todo de Añora, que es donde me he criado. Por ello, cuando participé en las pruebas me escribí en la mano el nombre de mi pueblo, para agradecerles el apoyo que siempre me muestran.