Había expectación por ver cómo encajaba el equipo de gobierno -y más concretamente el PSOE- la moción conjunta de Ganemos e IU para que el Ayuntamiento de adhiera a la campaña BDS contra el apartheid israelí, por la que el Consistorio se comprometería a no establecer convenio, contrato o acuerdo político, institucional, comercial, agrícola educativo, cultural o deportivo con instituciones, empresas y organizaciones israelíes hasta que el gobierno de Israel no respete los derechos humanos, reconozca el derecho internacional y acate el derecho a la autodeterminación del pueblo palestino. Fue la plataforma cordobesa en apoyo del pueblo palestino la que defendió la propuesta, así como las ediles Amparo Pernichi (IU) y María de los Ángeles Aguilera (Ganemos), quienes expusieron todas las vicisitudes por las que está atravesando la población palestina por el acoso de Israel, si bien dejaron claro que excluían de este boicot a las empresas y entidades que reconocen los derechos inalienables del pueblo palestino.

Desde el PSOE, la portavoz Carmen González ya avanzó antes del pleno que "tal y como estaba redactada la propuesta" no la apoyarían, dando a entender un voto negativo a la misma. Ya en la sesión, los grupos de UCOR, Ciudadanos, PP y PSOE coincidieron en que Córdoba es sinónimo de entendimiento entre culturas y que tomando como base el pasado también sefardí de la ciudad no procedía el apoyo a esta declaración. Finalmente, el voto negativo de la oposición (PP, UCOR y Ciudadanos) permitió a los socialistas no tener que votar en contra y abstenerse, si bien el rostro de contrariedad de Ganemos e IU con la postura socialista fue evidente.

La plataforma en apoyo a Palestina no fue el único colectivo que intervino en el pleno, ya que también lo hicieron dos colectivos de vecinos de Fátima y Alcolea para reclamar la mejora de los arroyos de la zona y así evitar problemas de inundaciones en el futuro. Tras un áspero debate entre unos y otros sobre competencias y responsabilidades en los cauces evitó un acuerdo entre los grupos. Finalmente, el bipatirto y Ganemos hicieron valer su mayoría para instar a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir a que actúe en el mantenimiento y conservación de los arroyos, así como a que firme un acuerdo de colaboración con el Ayuntamiento.