El Gobierno central ha confirmado que los dos incendios en los bazares chinos de los últimos meses fueron provocados. Interior ha ratificado esta suposición al diputado socialista Antonio Hurtado, tras la pregunta de éste en una sesión plenaria del Congreso de los Diputados.

Tal y como informó ayer Hurtado, la respuesta del Gobierno de Mariano Rajoy es que, los resultados actuales de la investigación indican que "los incendios fueron provocados, descartándose en ambos casos la etiología accidental". El socialista informó también de que de la respuesta del Ejecutivo se desprende que aún continúan las investigaciones "tendentes al total esclarecimiento de los hechos reseñados".

Según el Gobierno, las actuaciones policiales que se han llevado a cabo en estos incendios, atendieron a los métodos y protocolos de trabajos establecidos para este tipo de supuestos. Dichos protocolos han consistido en la inspección ocular técnico-policial, realizada por funcionarios policiales expertos en investigación de incendios, pertenecientes a la Brigada Provincial de Policía Científica de Córdoba, con el objetivo de recoger vestigios o pruebas relacionadas con las causas del hecho.

El socialista adelantó también que la respuesta gubernamental establece que se han llevado a cabo gestiones en el entorno de las personas relacionadas con los establecimientos comerciales "con el objetivo de dar inicio a una investigación policial que pueda concluir con el esclarecimiento de los hechos y sus causas, así como de las personas que pudieran resultar responsables de los mismos". Los dos siniestros sobre los que Hurtado ha preguntado en el Congreso tuvieron lugar en enero y marzo de este año. El primero de ellos se inició en enero en Cañito Bazán y obligó al desalojo de los bloques del edificio Jardines de Trassierra. El segundo empezó en la calle Julio Pellicer, en Ciudad Jardín, y los encargados de su extinción también se vieron en la obligación de sacar de sus viviendas a 250 vecinos.

En ambos casos, los locales no contaban con el permiso de apertura para ejercer la actividad comercial. En el de Ciudad Jardín, además, el juez imputó a la dueña por un posible delito de incendio -con daños personales y materiales- y otro de estafa. La propietaria de este bazar chino es sospechosa de haber provocado el fuego con fines ilícitos, como podría ser percibir alguna contraprestación económica.