JOSÉ Moreno. Arquitecto

"La mitad del suelo urbanizado de Córdoba fue parcelación ilegal "

  • Está convencido de que el Plan del Área Metropolitana de Córdoba debe ser el "instrumento perfecto" para ordenar la periferia de la ciudad.

José Moreno es un experto en parcelaciones, tanto que la Asociación Amigos de Medina Azahara le encomendó la tarea de explicar cómo han proliferado en la ciudad este tipo de construcciones desde el final de la Guerra Civil. Ayer lo hizo a través de la conferencia Historia reciente de Córdoba y sus parcelaciones: 1939-2011, pronunciada en la Facultad de Filosofía y Letras.

-¿Hasta qué punto las decisiones políticas ha influido en que en Córdoba continúen miles de parcelas sin legalizar?

-La política ha pesado mucho; no obstante, creo que el problema radica en la complejidad del proceso de legalización y en que las soluciones no están claras y son difíciles. Cómo arreglarlo no es algo que esté contemplado en la legislación urbanística, por lo que la gestión es complicada y ver qué modelo tienen que tener las parcelaciones dentro de la ciudad es difícil. Lo que está claro es que las parcelaciones, que afectan a casi el 10% de la población de Córdoba, es un tema que está en todas las campañas.

-¿Y cuál es la historia de las parcelaciones cordobesas? ¿Cómo se ha llegado a esta situación?

-Las parcelaciones van paralelas a cómo ha ido creciendo la ciudad, asociadas a los planes generales. El auge de este tipo de construcciones tiene dos momentos muy marcados. Hasta antes de 1979, en los años de bonanza económica de la década de los 60, tras la aprobación del plan urbanístico del 58, surgen las de la Sierra; y después, tras la aprobación del plan general del 86, proliferan las de la Vega.

-¿Qué daños o beneficios cree que han causado a la ciudad?

-El daño es que se ha ocupado mucho territorio y que las más extensas son más caras de mantener y de ejecutar. Además, se ha perdido parte de zona natural en la Sierra y de cultivos en la Vega. Entre los beneficios está el hecho de que la ciudad ha crecido. Pero tendríamos que preguntarnos qué entendemos por ciudad, porque dentro del casco urbano no quedan prácticamente.

-Pero han crecido sin ir de la mano de los distintos planes de urbanización

-Está claro que mientras la ciudad ha ido creciendo de una determinada forma, adecuándose al planeamiento y por contiguidad, las parcelaciones han crecido por su cuenta. No han sido algo previsto para una demanda de segunda residencia. Lo que ocurre es que es ahora cuando a ese crecimiento de la ciudad le estorban las parcelaciones. Sobre todo, ese estorbo es mayor al plantearse el área metropolitana, ya que se han encontrado con que las parcelaciones están en medio. Las parcelaciones condicionan el planeamiento futuro.

-Y todo porque algunos gobiernos municipales del pasado siglo miraron para otro lado mientras proliferaban

-Es que en los años 60 y 70 todos esos terrenos se consideraban campo y la casa en el campo era lo normal. Después, con el plan del 86 hubo intentos de legalizar, incluso a través de diversos planes especiales como los de las parcelas del entorno del aeropuerto, que nunca llegaron a concretarse. Desde que comenzó el periodo democrático ha habido intentos, lo que ocurre es que tras la aprobación del plan del 86 el problema era ya muy grande.

-¿Cuánta superficie se ha transformado a lo largo del tiempo?

-En 70 años la ciudad creció de unas 270 hectáreas en 1939 a 8.700 hectáreas en 2011, de las que prácticamente la mitad, 4.300 y pico tienen su origen en una parcelación. La mitad del suelo transformado de Córdoba, aunque ahora esté legalizado, tiene su origen en una parcelación ilegal, como es el caso de partes de las zonas periféricas como Alcolea o Villarrubia. Es más, en la periferia las parcelaciones consolidadas han marcado en exclusiva luego qué suelo se clasificaba luego como urbanizable en los planes generales. En 2001, por ejemplo, se tomó la decisión de que todas las de la Vega pueden ser urbanizables, el cómo es lo que habrá que ver.

-Tras la primera legalización, la de Barquera Norte -ayer-, ¿cree que ese problema se resolverá pronto, en cadena?

-Barquera Norte empezó el camino de la legalización en 2002 y ese camino para el resto de parcelaciones va a ser igual de complicado. Ha sido un primer paso, lo que ocurre es que quien vive en ellas y gana lo justo es difícil que pueda hacer inversiones en la mejora de su patrimonio.

-¿Y cuál es el futuro entonces?

-Hay que definir un modelo de ciudad de ese área metropolitana. O hay que revisar el plan general o ese plan metropolitano tiene que entrar de lleno en el problema y definir un modelo que sea posible decidiendo qué se va a hacer con ellas. Ahora se intentan legalizar, pero un modelo claro de cómo va a ser la periferia de Córdoba no lo hay.

-O sea, que el tema tiene visos de demorarse años

-Lo que está claro es que la solución no pasa por eliminarlas, porque costaría un dineral. Hay que definir un modelo y periferia que las integre y defina el papel que tiene en la ciudad. No tiene sentido una mancha de 4.000 hectáreas de segunda residencia. Hay que convertir esa mancha amorfa de chalets en pequeños pueblos, con dos o tres mil habitantes y con todos sus servicios. Creo que puede ser un modelo que funcione. Se tienen que poner de acuerdo y definir de una vez qué ciudad se quiere. Creo que hay que aprovechar el plan metropolitano para ordenar la periferia.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios