Los jefes médicos del Hospital Reina Sofía también están en contra de los recortes que va a aplicar la Junta de Andalucía. Los facultativos remitieron ayer un comunicado en el que muestran su apoyo al manifiesto suscrito por el 80% de los profesionales sanitarios del complejo hospitalario en el que se advierte de los efectos de la aplicación de estos ajustes, que ayer publicó El Día. En la nota, los directores de las Unidades de Gestión Clínica del Hospital Reina Sofía muestran su respaldo "al mensaje de rechazo a las desigualdades medidas de recorte que pudieran producirse entre las diferentes administraciones públicas y colectivos profesionales, así como de discriminación, basada en la situación laboral de los mismos".

No obstante, el manifiesto recoge la "aceptación y la comprensión" por parte de estos facultativos de los recortes presupuestarios, si bien, exigen que "se lleve a la práctica de modo proporcionado y equitativo entre todos los empleados públicos y de modo lineal". Es decir, que las medidas se apliquen según el sueldo y la categoría profesional, puesto que un jefe de servicio recibe un sueldo muy superior al de, por ejemplo, un enfermero o un celador. Se trata ésta de una demanda similar al planteamiento hecho por los médicos adscritos a todas las unidades del Hospital, que en su manifiesto aseguran que se ha optado por recortar en los salarios del personal frente a tomar medidas en aspectos menos necesarios dentro de la organización del sistema sanitario público.

Mientras que ocho de cada diez facultativos alerta de las consecuencias negativas que acarreará la aplicación de los recortes, los directores las Unidades de Gestión Clínica del Hospital Reina Sofía se comprometen a "garantizar la asistencia al paciente haciendo un uso racional y proporcionado de los recursos humanos y técnicos disponibles". Es más, inciden en su "vinculación con el compromiso ético hacia nuestros pacientes, que ha de materializarse en la consecución de las más altas cotas de calidad asistencial posibles y que debe prevalecer, ante todo, en el desempeño de nuestro ejercicio profesional". Eso sí, advierten de que "la dificultad manifiesta de cumplir algunos de los objetivos, en especial los referidos a los decretos de garantía de plazos, incluidos en los acuerdos de gestión clínica, en caso de que se materialice la prevista disminución de empleo y sueldo al personal sanitario interino o eventual".

Los médicos insisten en su apoyo al documento hecho público por sus compañeros y las medidas de respuesta al plan de recorte previsto, que se centra en no llevar a cabo tareas administrativas, sólo aquellas de carácter sanitario. A su juicio, estas actividades no asistenciales carecen de repercusión sobre la atención del paciente. Tal y como aseguran en documento avanzado por este diario, el personal médico no asisitirá a actividades que realiza, hasta la fecha, de manera voluntaria. Por ello, no participarán "en la docencia pre-grado de cara al curso próximo, renunciando a la altruista tarea de tutores clínicos" y también dejarán en suspenso todos los procesos de acreditación personal o de Unidad Clínica que están en marcha.

Este nuevo comunicado de los facultativos es similar al que ya han presentado otros médicos en el Hospital Virgen Macarena de Sevilla y en el de Jerez (Cádiz).

Ésta fue la respuesta que ayer ofrecieron los jefes médicos, mientras que desde la dirección del Hospital Reina Sofía no quisieron hacer ningún tipo de valoración porque "se esta en periodo de negociación", a pesar de que los facultativos anunciaran que los pactos de gestión con el Servicio Andaluz de Salud están rotos. La delegada de Salud, María Isabel Baena, tampoco quiso hacer declaraciones.