Unas 40 personas tuvieron que ser ayer desalojadas a causa de un incendio en el interior de una vivienda, situada en el número 2 de la calle Polichinela, junto a Santa María de Gracia. El fuego se originó sobre las 17:00 en el salón del piso, ubicado en la primera planta del bloque, a causa de un brasero.

Las grandes llamas y el denso humo que salían por las ventanas y los balcones de la vivienda alertaron a los vecinos de la zona, que de forma inmediata dieron aviso al Servicio de Emergencias 112. Rápidamente se personaron en la vivienda agentes de la Policía Local y de la Policía Nacional, junto al Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS) y una ambulancia del 061. Según fuentes del 112, el fuego provocó el desalojo de 40 vecinos del mismo edificio, debido a la aparatosidad del incendio. No obstante, horas después todos ellos pudieron volver a sus viviendas.

Fuentes del SEIS señalaron ayer tras la intervención que la vivienda afectada tuvo que ser apuntalada por el equipo de bomberos, debido a los daños provocados por las llamas, pero el bloque de pisos en ningún momento sufrió daños estructurales.

El servicio del 061 tuvo que atender a seis personas afectadas por inhalación de humo y a una anciana, que supuestamente se encontraba en el interior de la vivienda donde se originó el fuego, a causa a un ataque de ansiedad.

Varias decenas de curiosos se agolparon en la plaza Juan Bernier asombrados por el fuerte humo que salía por las ventanas del piso. Una de las vecinas comentaba con otras conocidas que se alertó al detectar en el interior de su casa un fuerte olor a quemado. "Me sobresalté mucho al notar que entraba por mi ventana un olor fuerte. Al momento escuché la sirena de los bomberos y al asomarme me impresionó la gran llamarada que salía desde el balcón de la vivienda que da a Santa María de Gracia", relataba. Otro vecino miraba desde el portal de su casa, a tan sólo unos metros de la vivienda afectada la intervención de los bomberos. "Cuando vimos el fuego y el humo me asusté muchísimo. Mi hija lo primero que hizo fue llamar al 112, pero por suerte el fuego no ha causado daños personales", aseguraba este señor.

El Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento pide a la sociedad especial atención durante los meses de invierno para evitar incendios en las viviendas provocados por estufas y braseros. Según los últimos datos presentados por la Fundación Mapfre, en Córdoba fallecieron en pasado año tres personas a causa del fuego. En España la cifra ascendió a 192 personas. Los siniestros más graves, según este mismo documento, se produjeron durante la noche y en invierno. El 70% de siniestros tuvieron lugar en edificios privados.