Este jueves 18 de abril se ha inaugurado en el IES La Rábida la exposición Libros juntos: Esplendor y Muerte de manos del onubense Juan Carlos Castro Crespo, que estará abierto al público hasta el 22 de mayo. Un título para una colección que plasma lo que para él son las librerías "esplendor por esa biblioteca y muerte por la muerte que van a tener esas librerías", aclaraba.

Durante la presentación de la exposición, Juan Antonio Moreno, el director del instituto, recordaba una anterior exposición de Juan Carlos Castro Crespo, El arte de la fuga, en esta exposición y añade que, 11 años después de esta, "Juan Carlos vuelve a casa". El director agradeció la presencia de todos los asistentes "interesados por el arte, por la cultura" también quiso poner en manifiesto que desde el instituto quieren "devolver a la ciudad todo lo que se ha hecho con este edificio", refiriéndose a las obras de remodelación del IES La Rábida, erigiéndose como un centro cultural en la capital.

Juan Carlos Castro en su estudio, en pleno proceso de creación en 2021.

En esta colección Juan Carlos Castro Crespo aclara que el título de la colección quiere representar "lo que yo he entendido que son las bibliotecas" y pone en relieve su convicción de que las librerías, menos las que considera "las joyas", acabarán desapareciendo con el tiempo. Él manifiesta la importancia que tiene invertir en la restauración de los libros "aunque sea carísimo el mantenimiento" ya que aclara que restaurar un libro es "mucho más caro que restaurar un cuadro de Velázquez".

A la inauguración asistieron también la corporación municipal en representación del Ayuntamiento de Huelva; Pastora Jiménez, concejala de turismo y educación; Wenceslao Font Briones, del grupo Vox y precursor de la asociación de antiguos alumnos del centro. La concejala de turismo alabó las obras del autor matizando que son "llamativas, especiales" y quiso darle la enhorabuena por la iniciativa de realizar la exposición en el IES La Rábida "para que también los más jóvenes se metan en este mundo de la cultura, en este mundo de la puntura". 

Detalle de uno de los cuadros de Juan Carlos Crespo.

Cuadros donde no priman las pinceladas

En cada cuadro se observa que la pintura es el elemento menos utilizado por el artista, que se sirve de otros elementos para conseguir un efecto mucho más llamativo. Manifiesta que busca continuamente "otras formas de decir lo mismo" pero sin emplear la pintura queriendo "sustituir una pincelada por algo que me ofrezca las mismas posibilidades que una pincelada".

Admite que a veces es "impresionante la cantidad de chasca que yo meto en el cuadro". Por ello podemos encontrar trozos de papeles, de periódicos, hojas de libros, mallas de alambre, piezas de construcción de juguetes y hasta trozos de la piel de una bota con cordones y todo. Por ello se puede observar que los lomos de los libros representados son recortes de papel, ninguno está pintado a mano, "me he partido el espinazo rompiendo papelitos", admitía Juan Carlos Castro Crespo, y es que cada detalles que se observa en el cuadro sorprende con el elemento con el que esta construido siendo, en el caso de los libros, con papel de propios libros.