Las tormentas volvieron ayer a causar serios problemas en la provincia de Córdoba. En esta ocasión, el municipio damnificado ha sido Nueva Carteya, donde una fuerte tormenta anegó de barro más de una decena de calles y numerosas viviendas de la localidad. Ése es el primer balance que anoche realizó el alcalde carteyano, Vicente Tapia (IU), quién precisó a El Día que la tormenta empezó a soltar agua en torno a las 20:00 "y menos mal que sólo duró un cuarto de hora, ya que de lo contrario los daños podrían haber sido más importantes". El regidor confirmó que "una vez más" las avenidas de Andalucía y Francisco Merino han sido las más afectadas, junto a otras vías como San Juan, San Pedro, Montilla y calle Llana, entre otras. En esta zona de la localidad, el barro entró algunas viviendas y los vecinos tuvieron que achicar agua con cubos para evitar daños.

Aunque no fue necesaria la presencia de los bomberos -al menos en un primer momento-, los efectivos de Protección Civil, operarios municipales y la  Policía Local trabajaron durante la noche para restablecer la normalidad en las principales vías de Nueva Carteya.

Fuentes del 112 confirmaron la presencia de balsas de agua y barro en algunos puntos de la carretera N-432 (Granada-Badajoz) a la altura de Santa Cruz, mientras que el alcalde carteyano indicó que casi todos los accesos a la localidad presentaban problemas, "por lo que mañana [por hoy] enviaremos informes a la Diputación y a Obras Públicas para que actúen; además, pediremos de nuevo a Emproacsa que limpie los imbornales para evitar que sucedan episodios como éste", indicó Vicente Tapia.

El primer edil explicó que los efectivos municipales disponibles se pondrán a trabajar a lo largo de toda la jornada de hoy para retirar el barro que aún quede en las calles y evaluar los daños. A finales de octubre de 2008, esta localidad ya sufrió los efectos de una tromba de agua, que afectó a calles y a unas 20 casas, provocando cuantiosos daños en mobiliario urbano.