La Consejería de Igualdad y Bienestar ha incorporado 108 nuevas plazas en centros residenciales dirigidas a las personas que necesitan algún tipo de servicio incluido en el Sistema de Atención a la Dependencia. Esta ampliación se debe a la firma de convenios con una decena de entidades que se llevó a cabo ayer en la capital cordobesa. La delegada de Bienestar, Silvia Cañero, concretó que 18 de estas plazas serán ocupadas por personas con discapacidad en el centro de gravemente afectados de la organización Prode en Pozoblanco, mientras que las 90 plazas restantes se destinarán a cubrir las necesidades de las personas mayores.

Cañero informó de que este concierto supondrá una inversión anual de 1,4 millones de euros. Con esta ampliación de la capacidad, en la provincia hay más de 5.800 plazas concertadas, de las que 3.580 atienden a personas mayores y 2.150 a personas con discapacidad. La delegada explicó que el mantenimiento de todas estas plazas supone un gasto de 50 millones de euros anuales, por lo que "la ayuda de estas entidades se hace necesaria para mejorar la calidad de vida de estas personas", apuntó la titular del Bienestar.

La representante de la Junta indicó que el principal objetivo de estas ayudas "es la mejora de la calidad de vida de estas personas que tienen dificultades para algunas labores del día a día", a lo que añadió que "también se convierte en un sector que genera puestos de trabajo, uno de los objetivos más importantes en la actualidad", apuntó.

Además del centro de discapacitados de la localidad pozoalbense, se suscribieron ayer al convenio las residencias Virgen de los Remedios (Aguilar de la Frontera), Sanyres, El Yate, La Casa Grande (Baena), Nuestra Señora del Rosario (Peñarroya-Pueblonuevo), los centros municipales de Iznájar y Conquista, Santa Magdalena (Fuente Palmera) y La Trinidad de la capital.