Las agradables temperaturas de los últimos días tocan a su fin por el momento. Y es que la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) confirmó ayer que los termómetros experimentarán este fin de semana un moderado ascenso en Córdoba. A partir de hoy el mercurio comenzará a subir hasta alcanzar los 37 grados, que se verán superados por los 38 grados estimados para mañana en la capital. Para el domingo se espera una situación parecida, con 37 grados. Por este motivo es muy probable que de nuevo en este verano, la Aemet active el sábado la alerta amarilla por el calor en la Campiña cordobesa y la capital. La alerta amarilla supone una categoría de "riesgo" para la población. Aún así, durante el sábado habrá una leve nubosidad, que no rebajará las temperaturas que se esperan.

Estas máximas rompen con la tónica que se estaba llevando a cabo desde la semana pasada en Córdoba, con temperaturas como las de ayer, de 34 grados de máxima y 18 de mínima según las mismas fuentes, que permitían disfrutar algo más de la tarde y noche cordobesas. En cuanto a las temperaturas mínimas, se mantendrán dentro de la estabilidad, sin sobrepasar poco más de los 20 grados. Así que por las noches no hará demasiado calor, quedando para el recuerdo aquella noche del 10 de agosto en que se superó el récord histórico en Córdoba de calor nocturno. Además, a partir del lunes habrá un ligero descenso.

La mayoría de localidades de la provincia, como por ejemplo Pozoblanco, Lucena o Peñarroya, se mantendrán con máximas más frescas que en la capital, de alrededor 33 grados durante el fin de semana.

Así, ante las temperaturas que se presentan para este fin de semana, los especialistas recomiendan evitar las actividades físicas y la exposición al sol en las horas centrales del día, así como mantenerse en lugares frescos en esos momentos, y evitar la deshidratación bebiendo entre 2 y 3 litros de líquidos en pequeñas cantidades, aunque no se tenga sed.