La Universidad de Córdoba (UCO) tiene un gran peso en la investigación nacional. Prueba de ello es que lidera numerosas clasificaciones que realizan diversas instituciones de España debido a la importancia de sus grupos científicos y publicaciones. Sin embargo, el hecho de ser una institución académica de tipo medio -unos 17.000 alumnos- y contar con una plantilla envejecida no la ha hecho beneficiarse del sistema de financiación autonómico en los últimos años. Por eso y, ante el nuevo programa en el que trabaja ahora la Junta de Andalucía con el resto de universidades andaluzas, la UCO quiere que se tengan en cuenta otra serie de factores, como el poder de su investigación, para recibir más dinero. Se trata de un claro mensaje que ayer lanzó el rector de la UCO, José Carlos Gómez Villamandos, durante la inauguración del curso académico 2016-2017 y delante del consejero de Economía e Innovación, Antonio Ramírez de Arellano, tanto en las declaraciones a los medios como en su propio discurso.

Ante la incertidumbre de la situación política en España -de la que dio buena cuenta-, Gómez Villamandos recordó al consejero que "el actual modelo de financiación de las universidades públicas andaluzas, prorrogado desde 2011, ha sido y es perjudicial para universidades como la de Córdoba, de marcado perfil científico-técnico y una intensa actividad investigadora, que colabora muy activamente a la visibilidad y posicionamiento del sistema andaluz en esta materia y no ve favorecida esta actividad".

"Le agradezco la determinación con la que ha acometido el diseño del nuevo sistema, confiando en que sea más justo y de respuesta equitativa a las necesidades y singularidades de cada universidad", añadió. Lo que vino a decir el rector es que el nuevo modelo de financiación que ahora se negocia y que debe estar listo antes de que concluya el año es que tenga en cuenta el perfil de cada universidad.

Conocedor del malestar de algunos rectores ante esta situación, el consejero reconoció que hay que cambiar los criterios por los que se financian las universidades. No en vano, el nuevo modelo de financiación de las instituciones académicas que se proyecta premiará la excelencia, lo que beneficiaría a la UCO, gracias a su elevado índice de publicaciones y la calidad de sus estudios de investigación. Aunque consideró que el modelo de financiación de los últimos ejercicios de la Junta no ha funcionado mal, Ramírez de Arellano sí que reconoció que ha durado quizás más de lo previsto para su vigencia y ha tenido "debilidades".

En su intervención, recordó que en los últimos diez años, las universidades han recibido más de 15.000 millones de euros y señaló que el nuevo modelo "tiene que permitir suficiencia, certidumbre y mantener un modelo que la financiación esté garantiza, planes de apoyo que compartamos", además de que "permita que se recuperen los derechos laborales de las plantillas".

El consejero destacó que "la universidad pública es un proyecto intergeneracional de toda la sociedad, como lo demuestra el que en 35 años Andalucía haya pasado de contar con el 22% de la población con formación reglada a una población activa con formación reglada en torno al 88%, algo que se ha conseguido defendiendo los valores de la igualdad de oportunidades y el mérito, entre otros aspectos". En el lado económico, Ramírez de Arellano defendió el hecho de que la deuda que mantiene la Administración autonómica con las universidades es ya "residual" y se cifra en 220 millones de euros, una cantidad "que pertenece a ejercicios anteriores y está encapsulada".

La respuesta de Gómez Villamandos también fue bien clara en este aspecto y anotó que "es justo destacar que el plan de pagos pactado con la Junta de Andalucía, conducente a aliviar las tensiones de tesorería y reducir la deuda, se está desarrollando muy satisfactoriamente, esfuerzo que agradecemos; este tipo de acciones creo que benefician a todos". Aún así, insistió en que "un sistema eficaz ofrece mejor servicio, es más útil y, al final, resulta más económico". Sin embargo, dijo que la situación actual "sigue siendo complicada con el bloqueo de subvenciones resultante de no haber culminado desde la Administración autonómica la validación de las justificaciones pendientes desde 2005, lo que puede llevarnos una situación extrema que ninguno deseamos". "No puede caer sobre los hombros de una universidad de nuestro tamaño, que ha hecho sus deberes, las consecuencias de procedimientos ajenos", subrayó el rector de la institución académica cordobesa.

Tanto en el inicio de su discurso, como en el final, Gómez Villamandos se sirvió del concepto de futuro y el devenir de los alumnos de la UCO. En sus primeras palabras ante los asistentes al acto de apertura del curso en el salón de actos Juan XXIII del Campus de Rabanales, el rector aseguró que se trata de "una palabra difícil, un plan demasiado pospuesto por urgencias cotidianas" y llegó a citar una de las frases más conocidas del poeta y dramaturgo francés Víctor Hugo: "El futuro tiene muchos nombres. Para los débiles, es lo inalcanzable. Para los temerosos, lo desconocido. Para los valientes es la oportunidad".

A su juicio, en la Universidad de Córdoba "debemos abrazar la idea de futuro". Por ello, concluyó su discurso volviendo al futuro y sirviéndose del director de cine Woody Allen, quien en su día aseguró que: "Me interesa el futuro porque es el sitio donde voy a pasar el resto de mi vida". Por eso, el rector de la UCO se preguntó "¿quién no compartiría esa reflexión? El futuro comienza hoy y aquí".