La Policía Nacional ha desmantelado una organización criminal dedicada al narcotráfico que operaba entre las provincias de Córdoba y Málaga, ha detenido a 21 personas, de edades comprendidas entre los 30 y los 63 años, de las que ocho ya están en prisión, e intervenido 44,2 kilos de hachís y casi un kilo de cocaína, además de dinero, vehículos y armas, que se han encontrado tras 13 registros realizados en domicilios y empresas de ambas provincias.

La operación Tiovivo, que se culminó el 19 de mayo, se ha desarrollado en cuatro fases y como resultado de las mismas se da por desarticulada la organización delictiva dedicada al tráfico de drogas y a la distribución de sustancias anabolizantes. De hecho, los agentes han intervenido 44,2 kilos de hachís, 935 gramos de cocaína, 1.200 gramos de MDMA, 130 gramos de sustancias de corte, 168 gramos de marihuana, anabolizantes y esteroides, cinco básculas de precisión, una escopeta de cañones paralelos, 5.400 euros y 8.750 coronas suecas en efectivo, una máquina envasadora al vacío, una maquina de contar billetes, 22 móviles, tres automóviles y dos motocicletas, así como otros efectos.

La operación, que ha sido llevada a cabo por la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Comisaría Provincial de Córdoba, con la colaboración de la Unidad Udyco-Estupefacientes de Fuengirola, se inició a finales del pasado año, tras tener conocimiento los investigadores especializados en la lucha contra el tráfico de drogas de la posible existencia en Córdoba de un entramado delictivo dedicado a adquirir importantes cantidades de cocaína. Dicho grupo supuestamente adulteraba la cocaína para obtener mayores beneficios en su venta a pequeños y medianos traficantes de Córdoba y provincia, y también se dedicaban a distribuir anabolizantes y esteroides a personas relacionadas con el mundo del deporte, sin pasar ningún tipo de control sanitario al efecto.

Los investigadores comprobaron que se trataba de una organización perfectamente estructurada, con reparto de funciones, estabilidad temporal y con el único fin de traficar con dichas sustancias estupefacientes, por lo que se optó por poner en manos de un juez en ese momento la investigación.

Tras establecer varios dispositivos policiales, se logró interceptar y detener, el 28 de marzo, a los dos primeros miembros de la organización, cuando entraban en la ciudad de Córdoba, a bordo de un turismo, procedentes de Fuengirola, lugar donde habían comprado 35,5 kilos de hachís.

Como consecuencia de dicha detención, los agentes registraron tres domicilios cordobeses, donde intervinieron 1.200 gramos de MDMA, 54 de cocaína y 130 de sustancias para adulterar la cocaína, así como anabolizantes y esteroides y diversos efectos relacionados con el tráfico de drogas.

Con la documentación intervenida, así como por diversas gestiones policiales posteriores, los investigadores lograron localizar el inmueble utilizado en Fuengirola para el embalaje y almacenamiento del hachís intervenido, así como determinar el miembro de la organización con residencia en Córdoba que había encargado la compra de la droga.

De este modo, una vez que recopilaron las pruebas necesarias, pusieron en marcha las dos siguientes fases de la operación. El 9 de abril se llevaron a cabo diversos registros y se detuvo en Córdoba a una persona y a otras tres en Fuengirola, donde se intervinieron otros nueve kilos de hachís y 8.750 coronas suecas, así como una maquina envasadora al vacío y multitud de bolsas de plástico, con la que envasaban el hachís, al objeto de evitar que fuese detectado por perros adiestrados en un hipotético control policial.

Como colofón a la operación, el 19 de mayo los investigadores realizaron ocho registros en distintos domicilios. Uno se llevó a cabo en una tienda de compra y venta de vehículos de ocasión que la organización tenía en un polígono industrial de Córdoba para blanquear los beneficios obtenidos por la venta de las sustancias estupefacientes, y otro en una nave ubicada en el Parque Joyero de Córdoba, utilizada, presuntamente, como laboratorio para el corte y adulteración de las sustancias estupefacientes.