El Ayuntamiento sigue buscando una solución para desbloquear la paralización de la obra de la antigua escuela de Magisterio, el principal proyecto Urban Sur y que contempla la conversión del edificio en un centro para la promoción de actividades e industrias culturales. Las obras llevan paralizadas desde el verano porque la empresa adjudicataria solicita un incremento del presupuesto porque que se habían superado los costes hasta cinco veces más de lo previsto en el proyecto técnico. La comisión de seguimiento del Urban celebró ayer una reunión en el que se puso encima de la mesa el problema aunque se sigue buscando una solución.

Una de las posibilidades es pedir una prórroga a Europa para mantener los fondos que financian el proyecto, ya que a estas alturas está claro que no se va a poder justificar el desarrollo de la obra. Igualmente, también se plantea redefinir el proyecto y ajustarlo, aunque también está la opción de rescindir el contrato con la empresa adjudicataria, aunque esto suponga el pago de una indemnización. No obstante, parece que el objetivo del gobierno municipal es intentar que la obra salga adelante para que su paralización no influya en pleno año electoral.

La Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) ya hizo llegar a la empresa un modificado de 380.000 euros más en el presupuesto, aunque poco después dio un paso más e inició un mes un expediente sancionador a la empresa en la que le reclamaba 165.000 euros por el retraso pero sigue sin haber un acuerdo entre la constructora y el Consistorio.