La estadística pone de manifiesto que barrios como Las Palmeras, Las Moreras y Guadalquivir sufren cada vez más un mayor grado de exclusión social y, por tanto, su marginalidad con respecto al resto de la ciudad resulta más que evidente. Entre la batería de datos que facilitó ayer la Asociación Andaluza de Barrios Ignorados -de reciente creación y que aglutina a alrededor de una treintena de barriadas en exclusión social de toda la comunidad- sobresalen aquellos números que están relacionados con el desempleo. El colectivo apuntó durante su presentación en Córdoba que el paro afecta ya a más del 70% de las familias que residen en estos núcleos. En cifras redondas, este porcentaje se traduce en que casi 13.000 de sus 18.500 vecinos están desempleados y que un elevado número de ellos ni siquiera recibe remuneración económica alguna. "Es una situación dramática", declaró el portavoz de la citada asociación, Manuel Díaz, al que acompañaron vecinos y voluntarios de las citadas zonas de la capital.

Los datos aportados por esta asociación sitúan a Las Palmeras como la barriada que está sufriendo los efectos de la crisis con una mayor virulencia. Para subrayar el deterioro social que padece este núcleo situado en el extremo del Distrito de Poniente Norte, el representante del colectivo en la zona, Antonio Fernández, cifró en un 62% el porcentaje de la población al que se le han agotado los subsidios. Declaró que los más jóvenes "ya no pueden percibir la paga por desempleo o las ayudas sociales" y que la "inmensa" mayoría de los mayores de 65 años "no han cotizado el tiempo suficiente como para tener una pensión". Fernández subrayó que este escenario conduce a un incremento de la delincuencia y la economía sumergida. "Roban para comer si hace falta", precisó el portavoz de la Asociación Andaluza de Barrios Ignorados.

Entre las principales consecuencias que acarrea la pérdida de ingresos, total en más de la mitad de la población de estos barrios, figuran los desahucios de las viviendas, ya que la mayor parte del parque inmobiliario de Las Morenas, Las Palmeras y el Guadalquivir son pisos sociales que gestiona la Empresa Pública de Suelo de Andalucía (EPSA). En este capítulo, también es Las Palmeras la zona que cuenta con peores registros. En concreto, según detalló el portavoz del colectivo en este enclave, 11 familias están apercibidas de desahucio como consecuencia de los retrasos que acumulan en el pago de las mensualidades y, por tanto, se exponen a la pérdida del piso. El portavoz del colectivo autonómico señaló que, aunque tiene una menor incidencia, esta situación se repite también en Las Moreras y el Guadalquivir. Puntualizó que el promedio de deuda asciende a unos dos años de cuotas impagadas; es decir, entre 3.000 y 6.000 euros que le deben a EPSA por el alquiler de estos inmuebles.

Las consecuencias no se quedan, en cualquier caso, en el desahucio o el apercibimiento del mismo. Los representantes de unos y otros barrios en exclusión social -calificados por ellos mismos como "barrios trastero" de Córdoba- aludieron al incremento de los cortes de suministro eléctrico y de agua para el "cada vez más numeroso" grupo de vecinos que no pagan los correspondientes recibos. "La situación es de desesperación", manifestó Díaz. Para tratar de detener los desahucios, el colectivo propuso ayer la realización de un estudio para concluir "qué personas pueden pagar y qué otras no pueden hacerlo", de manera que "no se eche de su vivienda a los que no tengan ningún ingreso para hacer frente a los pagos".

Muchas las fórmulas que planten los integrantes de esta flamante asociación, pero poco el tiempo y el margen de maniobra que tienen para actuar. Entre sus propuestas figura una que ha formado parte del último programa electoral de IU. Se trata del pago de una renta básica dirigida a las personas que carecen de cualquier tipo de subsidio de desempleo. "Tenemos que conseguir que la Junta de Andalucía lo apruebe para que entre en vigor cuanto antes", manifestó Francisco Povedano, voluntario en la zona de Las Palmeras. Explicó a este respecto que el motivo de desarrollar una iniciativa de estas características es porque saben que "el problema se va a eternizar".

Para concluir, el presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos Al-Zahara, José Rojas, aludió al apoyo a la recién creada asociación por parte del colectivo al que representa e hizo un balance del delicado momento que atraviesan estos tres barrios, así como la treintena de toda Andalucía que defiende el colectivo de Barrios Ignorados. Al abundar en su situación, Rojas recalcó el "estigma que sufren los vecinos de estos barrios cada vez que se disponen a buscar un puesto de trabajo". Puso como ejemplo el caso de las trabajadoras del servicio doméstico, que "no pueden decir que son de Las Palmeras o Las Moreras, porque saben que si lo hacen tienen muchas posibilidades de no ser contratadas". Precisó, por último, que "podemos hablar de pobreza total" tanto en Las Palmeras como en Las Moreras y el barrio del Guadalquivir.