Toros

Ataques políticos a la Fiesta

  • Desde que el funesto tripartito catalán prohibiera los festejos por un tema identitario, se han sumado otras comunidades y ayuntamientos en busca de la abolición de la tauromaquia

Desde los albores de la tauromaquia, reyes e incluso papas dictaron normativas para prohibirla en España. Tras un periodo en el que toros y política no iban de la mano, en el siglo XXI han saltado a la palestra varios políticos espontáneos que tienen su punto de mira en la prohibición del segundo espectáculo de masas que genera más de 1.600 millones de euros anuales.

Desde que el funesto tripartito catalán (CiU, PSC y ERC) decidiera utilizar los toros como baza identitaria de España para su singular cruzada separatista, con los votos de separatistas, convergentes y también de socialistas, los ataques políticos a la Fiesta no han cesado.

En los casos más recientes, el PSOE, para gobernar, se ha asociado con separatistas y/o Podemos y sus franquicias e incluso se ha sumado en algún caso Ciudadanos.

Aquella votación tuvo lugar el 28 de julio de 2010. El PP recurrió la decisión exactamente tres meses después por incumplimiento de una docena de artículos de la Constitución. El Alto Tribunal todavía no ha dictado sentencia sobre ello. Hay quienes creen que lo hará el próximo septiembre, prácticamente a los seis años, si ello se cumple.

El alcalde de Játiva, el socialista Roger Cerdá, tras una querella criminal por querer prohibir arbitrariamente el espectáculo taurino, ha admitido hace unos días ante el juzgado que no existía nada que lo prohibiese, pero a continuación y, según Aplausos.es, su concejal Ignacio Reig afirmó con rotundidad en una emisora local que "no vamos a dar permisos para toros" con lo que se saltará la ley a la torera. Además, el concejal aseguró que no se da el permiso porque la plaza tiene una serie de deficiencias en su estructura; y sin embargo lo dará para otros espectáculos, como motos y caballos. José Calatayud. portavoz de las peñas Club Taurino Punteret y la Peña Socarrats, quienes presentaron la querella, se pregunta: "¿Cómo pueden ser tan cínicos y asegurar la semana pasada en los juzgados que ellos no prohiben los toros?". Ahora, la Agrupación de Profesionales Taurinos Luchadores se han querellado contra el socialista Cerdá, Miguel Lorente (EU) y Cristina Suñer (Compromís).

En Madrid, donde Manuela Carmena, con el apoyo del Grupo Socialista, retiró la subvención de 60.000 euros a la Escuela Taurina de la capital, una cantidad insignificante si se tiene en cuenta que los toros han generado este año en Madrid 414 millones de euros. Sólo a San Isidro asistieron 620.000 espectadores a Las Ventas, pero Carmena, que ha desahuciado al citado centro, cobró los 30.000 euros del Premio Nacional de Tauromaquia 2015, concedido por el Ministerio de Cultura a la citada Escuela de Tauromaquia de Madrid.

En la recién terminada Feria de Santander la oposición, en bloque con la oposición del PP, a un escaño de la mayoría absoluta, ha retirado la subvención en una ciudad en la que la incidencia económica del ciclo supone ocho millones de euros y en el que por cada euro invertido se consiguen 70 euros. Pero socialistas, regionalistas, Ciudadanos y Podemos, que conforman la oposición, quieren liquidar un espectáculo legal y tradicional de la maravillosa ciudad cántabra.

El alcalde de Valladolid, Óscar Puente (PSOE), ha retirado la subvención a la Fiesta; lo que no ha hecho con otros espectáculos con muchísimos menos seguidores que las corridas de toros. El edil, que gobierna gracias al apoyo de los grupos Valladolid Toma la Palabra y Sí se Puede, afirma que el Ayuntamiento "no es antitaurino" y la decisión obedece "a la dirección que marcan los tiempos", según recoge Efe. Eso debe ser, los nuevos tiempos, porque, según un estudio de la Economía del Toro realizado por el profesor de la Universidad de Extremadura Juan Medina, la Feria de Valladolid "reune a 51.000 personas, cerca de los 55.000 espectadores del Festival de Cine que, sin embargo, se lleva 1,6 millones de euros en subvenciones", entre tanto la subvención para la Feria es de "180.000 euros, aproximadamente diez veces menos. En cuanto a IVA recaudado, la feria taurina deja 37 veces más ingresos fiscales que el Festival de Cine".

Y ya aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, el Ayuntamiento de Tordesillas, cuyo regidor es el socialista José Antonio González Poncela, también se ha cargado los espectáculos taurinos. El desencierro del denominado Toro de la Peña sustituirá al Toro de la Vega y, por primera vez, este año no se celebrarán rejoneo ni novilladas, según adelanta Europa Press, lo que posiblemente se dará a conocer el próximo 15 de agosto.

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